Las autoridades de la filial en la Argentina de la automotriz Renault decidieron suspender las operaciones en la planta de Santa Isabel, en Córdoba, ante las protestas que los gremialistas iniciaron para reclamar un aumento salarial. Los sindicalistas del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), que reclaman un suba salarial de 25%, más un pago de 150 horas, iniciaron las medidas de fuerza el miércoles y amenazan con extenderlas a otras plantas de esa provincia.
El jueves por la tarde realizaron un corte sobre la ruta 5, camino a Alta Gracia, además de asambleas de dos horas por turno dentro de la planta, para reclamar el incremento.
"Este bono extra lo tuvimos el año pasado y consideramos que este año también se debe pagar", indicó Ángel Tello, secretario adjunto del gremio Smata, en referencia al reclamo.
Los gremialistas advirtieron que las medidas de fuerza podrían profundizarse en los próximos días y no descartaron que a la protesta se sumen también otras automotrices de Córdoba, que vieron fuertemente afectada su producción por la crisis financiera.
La protesta se desató por el fracaso de las negociaciones llevadas adelante con la empresa, que ofreció a los empleados una suma fija de mil pesos como única suma desde enero a junio de 2009 y comenzar a discutir, en julio de este año, la pauta salarial hasta julio de 2010.
En tanto, otro grupo de metalúrgicos autoconvocados se manifestó ayer por la tarde en la rotonda de la ruta 9, en el ingreso a esta Capital, para reclamar por "reducción de horas de trabajo, eliminación de horas extras y temor a los despidos".