El 15 de septiembre ingresará a Diputados el proyecto de ley con las previsiones económicas del año electoral.El Gobierno mantendrá “pautas conservadoras” en el Presupuesto 2011.
El kirchnerismo repetirá la fórmula: las cifras del presupuesto 2011 arrancarán de parámetros macroeconómicos subestimados: crecimiento del país, inflación y recaudación.
Este esquema es duramente criticado por la oposición, que asegura que este tipo de presupuesto permite a la Casa Rosada un uso discrecional de los fondos excedentes de la recaudación, que este año alcanzarían los 25.000 millones de pesos.
Así, el panorama del debate que se abrirá a partir del 15 de setiembre, día en el que el Gobierno enviará a la Cámara de Diputados el proyecto de ley, no parece sencillo. Incluso ya se habla sobre la posibilidad de que si el Ejecutivo no logra que el Congreso apruebe un presupuesto más o menos a su medida, podría vetarlo y gobernar el año que viene con una prorroga del Presupuesto 2010.
Pero desde las bancadas opositoras no opinan lo mismo y reclaman que este año los números se sinceren.“Para 2011 queremos tener un presupuesto más controlado, con una pauta de gasto más transparente que la de este año”, advirtó el diputado Eduardo Amadeo (Peronismo Federal), vocal de la Comisión de Presupuesto y Hacienda. Amadeo sostuvo que este año el Ejecutivo “se apropió de los recursos” que tuvo por encima de las previsiones y opinó que “el problema” para el tratamiento legislativo es que “el Gobierno se niega a dialogar”.
El diputado de Proyecto Sur, Claudio Lozano, admitió que si el presupuesto 2011 “no tiene ningún vínculo con la realidad, va a ser muy difícil que sea aprobado”. Según sus estimaciones, este año el Gobierno tendrá gastos no previstos en el presupuesto 2010 por $55.000 millones, e ingresos extrapresupuestarios por $80.000 millones. Los números no le dan al oficialismo para evitar las modificaciones al proyecto de ley que enviará al Congreso.
En la Cámara de Diputados la oposición puede aplicarle su mayoría y aprobar cambios sustanciales en las pautas macroeconómicas. En el Senado, la votación será más equilibrada. Ante este panorama, nadie descarta que finalmente la Presidenta vete la ley si no sale “a su medida” y prorrogue el presupuesto 2010. El proyecto aún no se conoce, pero el debate ya está abierto.
Fuente: eltribuno.com