La calificadora de riesgo Moody’s consideró hoy que los nuevos créditos hipotecarios indexados por la Unidad de Valor Adquisitivo (UVA) “deberían ayudar a los bancos argentinos a satisfacer un esperado aumento en la demanda de hipotecas, a medida que la tasa de inflación continúa disminuyendo”.
El mecanismo, sustentado en recursos de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), será además “positivo para los bancos”, indicó Moody’s en su publicación ‘Credits Outlook‘ (Perspectiva de Crédito).
La agencia estima que ese tipo de financiamiento “fomentará el crecimiento en un segmento de mercado subdesarrollado y aumentará la exposición de los bancos a una clase de activos garantizados, apoyando su calidad, los beneficios y la diversidad de la cartera”, a la vez que ayudará a contener desajustes entre activos y pasivos.
“Los tres bancos estatales argentinos que inicialmente recibirán financiamiento de la Anses son el de la Nación Argentina, el de la Provincia de Buenos Aires y el de la Ciudad de Buenos Aires”, pero el sistema “se extenderá finalmente a los bancos privados”, anticipó Moody’s.
La calificadora precisó que los préstamos hipotecarios equivalen hoy a sólo 1% del Producto Bruto Interno (PBI) en la Argentina, comparado con el 20% en Chile y el 5% en Uruguay, donde se crearon “unidades de contabilidad vinculadas a la inflación que impulsaron el crecimiento hipotecario en sus respectivos mercados”.
El análisis aseguró que habrá “importantes oportunidades de crecimiento en este mercado”, teniendo en cuenta que en 2016 sólo el 13,5% de las transacciones inmobiliarias fueron financiadas con hipotecas.
“La penetración del mercado sigue siendo limitada debido a una alta tasa de inflación; mientras la falta de acceso de los bancos a una financiación estable a largo plazo ha restringido su capacidad de originar préstamos hipotecarios de tasa fija”, explicó la agencia.
Los bancos, en ese contexto, se vieron obligados a estructurar hipotecas con altos pagos mensuales iniciales, “por lo que son inasequibles para muchos prestatarios potenciales”.
El nuevo sistema, adelantó Moody’s, “permitirá a los bancos ofrecer pagos iniciales mucho más bajos, haciendo que las hipotecas sean accesibles para los prestatarios de ingresos bajos y medianos”.
Las hipotecas financiadas estarán denominadas en moneda local y a plazos de hasta 30 años, a una tasa de interés anual fija del 5%, con el valor del préstamo ajustado a la inflación durante la vida del préstamo.
La financiación estará disponible para préstamos de hasta un millón de pesos y la cuota mensual inicial en ese caso sería alrededor de $ 5.000, lo cual “es competitivo con los alquileres en departamentos comparables”.
Moody’s consideró que el desarrollo de un mercado hipotecario más profundo creará para los bancos “nuevas oportunidades de préstamos, no sólo hipotecarios, sino también para la venta cruzada de otros productos crediticios”.
También estimó que aumentará la demanda habitacional real, ya que “en años anteriores las compras de vivienda a menudo se realizaban como una protección contra la inflación en ausencia de alternativas viables”.
“Esto ayudará a preservar la calidad de las carteras hipotecarias existentes de los bancos”, concluyó la calificadora.
Fuente: El Cronista