Volkswagen, la mayor terminal automotriz de Europa, implementará desde hoy jornadas reducidas de trabajo en varias plantas de producción, debido a la crisis provocada por el marcado descenso en las ventas.
La reducción de la jornada laboraL, medida que la empresa aplicará por primera vez en veinticinco años, afecta a las plantas de las ciudades alemanas de Wolfsburgo, Emden, Hannover, Zwickau y Dresde, según la agencia de noticias DPA.
En total, dos tercios de los 92.000 trabajadores de Volkswagen en Alemania se ven afectados por la paralización parcial en las plantas nacionales; mientras que unos 61.000 trabajadores dejarán de producir vehículos durante toda la semana, retomando las labores a pleno el primero de marzo.
Los ingresos de los trabajadores apenas se verán afectados, informaron tanto la patronal como el consejo de la empresa, que aglutina a los representantes de empleados y trabajadores.
Volkswagen, que sufrió en enero una caída de ventas de sus vehículos en 21,3%, calcula que para todo el año la reducción de todo el grupo, incluyendo subsidiarias como SEAT, será del orden del diez por ciento.