La generación de empleo es una de las variables de la economía argentina que más preocupa a la población, dado que la cantidad de puestos de trabajo lleva una década estancada mientras, naturalmente, la cantidad de personas en edad laboral crece a paso firme.
Tal es así que por cada 100 puestos de trabajo en el sector privado registrado que había en enero de 2012 a marzo de 2021 había apenas 96,3, según el Ministerio de Trabajo en su serie desestacionalizada. Como son datos del sistema previsional, no contabiliza los asalariados informales.
Se trata de una caída neta de 224.000 en términos netos, una cifra gravísima teniendo en cuenta que la franja de la población entre 20 y 64 años inclusive creció más de 3 millones en el período, dado que los analistas estiman que este segmento etario se robustece en cerca de 300.000 personas por año.
La serie que comparte el Ministerio de Trabajo comienza en enero de 2009, desde cuando los empleos crecieron en 220.000 a pesar del estancamiento desde 2011. Pero ni siquiera la generación de empleo formal desde 2009 alcanza a cubrir el incremento de la población en edad de trabajar que hay en un año.
Las cifras actuales están por debajo de las de diciembre de 2010, a pesar de que la serie desestacionalizada ya superó el nivel de abril del año pasado. Respecto a la prepandemia, febrero de 2020, sigue en torno a 140.000 puestos por debajo.
Los empleados públicos en cambio sí ganaron un terreno considerable desde 2012. Pasaron de casi 2,5 millones a 3,25 millones en casi 10 años.
La cantidad de monotributistas también se robusteció, de 1,3 millones a 1,6 millones, mientras que los autónomos pasaron de 408.000 a 383.000.
Con la llegada del coronavirus y la adopción de las consiguientes restricciones a la actividad el empleo privado formal sufrió un golpe muy doloroso: desde febrero de 2020 a agosto, el punto más bajo desde entonces, se destruyeron casi 190.000 puestos de trabajo.
Los datos de marzo muestran que actualmente las cifras están en casi 50.000 empleos privados por encima de ese nivel mínimo relativo, por lo que todavía restan recuperar otros 140.000 puestos para poder llegar a niveles prepandemia.
POR SECTORES
Por sectores, desde 2009, en términos netos los que tuvieron mayor puestos de empleo generados fueron servicios sociales y de salud con más de 95.000, seguido por comercio y reparaciones con casi 91.000 y enseñanza con 80.000.
En contrapartida, cayó fuerte el empleo en industrias manufactureras (82.322) y construcción (casi 50.000).
Pero en el acumulado desde enero de 2012 es totalmente negativo. Solamente tienen saldos positivos minería, con 5000 puestos netos generados; suministro de electricidad, gas y agua, con 14.600; enseñanza, con casi 50.000, y servicios comunitarios, con casi 60.000.
En cambio, la industria manufacturera lideró las caídas con casi 155.000 puestos, seguida por la construcción con 88.000. Hoteles y restaurantes perdieron más de 35.000 y actividades inmobiliarias, más de 28.000.
Desde la pandemia, las mayores caídas lógicamente se observaron en los sectores de la economía que sufrieron las mayores restricciones, como hoteles y restaurantes: entre febrero de 2020 y marzo de 2021 las empresas del rubro perdieron más de 55.000 empleos.
Le siguieron la construcción, con casi 30.000 puestos menos; servicios comunitarios, con más de 21.000; transporte y almacenamiento, con 20.000, y comercio, con una caída de 19.000 empleos.
Por: AGUSTIN SZAFRANKO
Fuente: El Cronista