Casi 240 mil metros cuadrados cubiertos no fueron inscriptos en Catastro. Algunas estructuras portuarias figuran como baldio. Los resultados preliminares de un operativo de fiscalización de la actividad comercial portuaria sobre los 31 puertos privados radicados desde Timbúes a Villa Constitución, mediante vuelos fotogramétricos encargados por la Subsecretaría de Ingresos Públicos provincial al Instituto Geográfico Militar y la Fuerza Aérea, arrojaron un alto grado de evasión. En las primeras siete terminales se detectaron 240 mil metros cuadrados de superficie construida no declarada, algo así como 24 estadios de fútbol al borde río que no existen fiscalmente.
Es más, una de estas compañías, que exporta cientos de miles de toneladas de granos al año, registra un intenso movimiento de barcos de ultramar en sus puertos y tiene construidos 80 mil metros cuadrados de infraestructura al borde del río, tiene declarada su propiedad ante Catastro provincial como terreno baldío. En este último caso, la no declaración de la superficie construida representa una pérdida para el fisco provincial de un millón de pesos sólo por impuesto inmobiliario, de los cuales la mitad corresponderían al municipio donde se encuentra radicado por la ley de coparticipación.
La subsecretaria de Ingresos Públicos, Teresa Beren, estimó que esta semana estarán los resultados definitivos del operativo, pero adelantó que al menos a una de estas compañías ya se le estableció el embargo preventivo sobre sus cuentas bancarias. Por otra parte, al resto de terminales en infracción y con aportes de datos cruzados con la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), se les "informará" sobre los datos con los que cuenta el Estado provincial sobre su situación catastral y fiscal y avanzará en la demanda de los impuestos no percibidos.
La mayoría de las empresas en virtual infracción se trata de multinacionales relacionadas con la agroindustria y la petroquímica, que anunciaron públicamente millonarias inversiones en los últimos años, realizaron inauguraciones e incluso cuestionaron al Estado santafesino por la falta de obras de infraestructura complementarias, como los accesos viales a sus terminales.
Su peso para la economía nacional es significativo, dado que intervienen en el 30 por ciento del comercio internacional del país. En tanto, sólo la cadena agroindustrial representan el 50 por ciento de la actividad en la provincia.
Por esta razón, Beren aseguró que el objetivo en esta primera etapa del operativo conjunto entre Catastro y la Administración Provincial de Impuestos (API), es "un relevamiento exhaustivo de la ocupación territorial de estas empresas, la determinación de sus instalaciones industriales y administrativas, su capacidad de acopio y operatividad respecto de sus muelles y movimientos de trenes de carga, barcazas y camiones, como también una aproximación de sus intervenciones en la manipulación comercial e industrial del cereal".
El relevamiento es apenas la punta de un iceberg ya que el fisco cuenta ahora con datos que prueban un aumento de la capacidad de almacenaje y procesamiento, lo que presupone un mayor volumen de operaciones. Y si bien la exportación no está gravada por impuestos provinciales como ingresos brutos, sellos o patentes, toda las actividades y servicios conexos sí lo están. Con lo cual deberían subir los ingresos tributarios por esos conceptos.
Por otra parte, la inteligencia fiscal se completa con el pedido de informes al primer eslabón de la cadena, en el caso de los granos a productores. Si bien estos también están exentos del pago de ingresos brutos, sus datos sirven para atar cabos en los dos extremos de la comercialización y así empezar a cerrar el circuito tributario en una actividad clave para Santa Fe.
La lupa en otros sectores
La subsecretaria de Ingresos Públicos provincial, Teresa Beren, insistió en que la salida que actualmente tiene la provincia —y en consecuencia municipios y comunas—para optimizar los niveles de ingresos es mejorar la gestión de la administración tributaria.
En este sentido, la funcionaria adelantó que otros dos sectores sobre los que se pondrá la lupa son el transporte de cemento y de combustible, que si bien no tributan en Santa Fe por tener sus sedes en otros distritos, son un indicativo del movimiento económico de otras actividades productivas que sí tributan en la provincia.
El crecimiento económico de los últimos años incluyó un fuerte incremento de la construcción de viviendas, incluso de barrios enteros, como los denominados "countries", en toda la provincia, mucha de la cual no está declarada.
En un reciente relevamiento realizado por los gobiernos locales en dos ciudades del interior provincial, también mediante fotos aéreas, se detectó que el 30 por ciento de las viviendas no figuraban en los registros.
En este sentido, la subsecretaria de Ingresos Públicos provincial señaló que desde el Ejecutivo apuestan a que antes de fin de año puedan volver a relevar fotográmeticamante todo el territorio santafesino, ya que desde 1996 no existen actualizaciones más que las declaradas por los propietarios o las detectadas in situ.
La Capital