El Índice de Capacidad de Pago de Argentina (ICPA), que elabora el Centro de Estudios de la Nueva Economía (CEN) de la Universidad de Belgrano, experimentó en julio una baja del 6,4 % respecto a junio y de un 39,3 % con respecto a igual mes de 2008.
El motivo de la caída en casi un 40% de la capacidad de pago de la Argentina, que continúa así en descenso desde hace prácticamente un año, radica en un incremento del gasto público a una tasa interanual que más que duplica al aumento que se verificó en los ingresos fiscales.
El director del CENE, Víctor Beker, destacó que el descenso registrado refleja, ante todo, una nueva caída en el superávit fiscal, que llegó a apenas 201 millones de dólares, un 85% menos que hace un año. Ello como producto del incremento registrado en el gasto público a una tasa interanual que más que duplica la del aumento verificado en los ingresos fiscales.
El superávit de balanza comercial también experimentó un descenso respecto a junio último aunque se situó por encima del nivel de julio de 2008.
El CEN recordó también que el tipo de cambio real sufrió un leve descenso, mientras que el nivel de reservas del Banco Central subió: "La frágil situación fiscal explica la necesidad de lograr un acuerdo con el FMI para abrir el camino al mercado de capitales", concluyó el estudio. La frágil situación fiscal explica la necesidad de lograr un acuerdo con el FMI para abrir el camino al mercado de capitales, concluyó Beker.
El 2 de septiembre de 2008, el titular del Banco Central, Martín Redrado, había señalado que la cancelación de la deuda con el Club de París, anunciada ese día por la presidenta Cristina Kirchner, era parte de una estrategía para reinsertar a la Argentina en el horizonte financiero internacional, a la vez que consideró que el nivel de las reservas seguía siendo robusto, dos razones que demostraban claramente la capacidad de pago del país. Aclaró además que "después del pago (al Club de París), la Argentina seguirá manteniendo niveles de reservas internacionales robustos como proporción del producto tanto en la comparación internacional como en su devenir histórico…".
A poco más de un año de distancia y con las deudas argentinas en el exterior aún en veremos, la situación parece ser exactamente la inversa.
El ICPA se elabora en base a un promedio ponderado de cuatro indicadores: resultado fiscal primario medido en dólares, tipo de cambio real, reservas del Banco Central y saldo de la balanza comercial.
Lejos de los países competitivos
Dado a conocer en Suiza, el Informe de Competitividad 2009/2010 que elabora anualmente el Foro Económico Mundial (WEF) ubica a la Argentina en el puesto 85 respecto a 133 países evaluados.
El análisis califica al desempeño nacional como "decepcionante" dadas las cualidades competitivas del país. La competitividad argentina escaló 3 niveles en el último año. En el primer puesto quedó Suiza, seguida por Estados Unidos, Singapur, Suecia y Dinamarca.
En el ámbito latinoamericano Chile tuvo el mejor desempeño con el 30º puesto, seguida por Puerto Rico (42) y Barbados (44). Brasil obtuvo el puesto 56 escalando 8 posiciones. En Argentina el centro de estudio de negocios IAE-Universidad Autral fue el consultor asociado del Foro Económico para realizar el análisis local.
