Hay preocupación entre los senadores santafesinos por que las promesas para los productores de leche no se cumplen.
A partir de una iniciativa del senador Felipe Michlig (UCR), la Cámara alta manifestó su preocupación por el incumplimiento del acuerdo marco firmado entre el gobierno nacional, las empresas lácteas y representantes de productores lecheros.
El proyecto del legislador por San Cristóbal, Felipe Michlig, fue acompañado por los senadores Alcides Calvo (Castellanos- Frente para la Victoria), Juan Carlos Zabalza (Rosario) y Federico Pezz (General Obligado), ambos del Frente Progresista Cívico y Social, y en su texto recuerda que el último acuerdo firmado para fijar en $ 1,00 el precio por litro de leche que recibiría el tambero a partir de noviembre -producción de octubre-, no ha sido respetado por el Gobierno Nacional. En la iniciativa aprobada por el senado se hace referencia a abundante información de medios especializados que confirman esta circunstancia y generan descreimiento e incertidumbre en el sector de la producción tambera teniendo en cuenta que las propias usinas lácteas venían advirtiendo que pagarían en noviembre la producción de octubre con precios inferiores a los acordados, que oscilan en alrededor de los 80 centavos. Recuerda en ese sentido que el sector industrial justificaba la imposibilidad de pagar el precio de referencia dado que el gobierno no transfería en tiempo y forma el subsidio que comprometió al rubricar el acuerdo tripartito. Un ejemplo de ello lo proporcionaba el periódico 'TodoAgro' en su edición de la primera quincena de noviembre, al anticipar que la cooperativa Sancor iba a pagar 85 centavos por litro a sus productores y recién cuando reciban el subsidio de 15 centavos lo trasladarían al productor para conformar el peso acordado. Con el correr de los días los anticipos se tradujeron en hechos concretos y las empresas lácteas pagaron lo que dijeron poder pagar, lo que significa para el productor en el escenario más favorable cubrir ligeramente los costos y fuertes pérdidas para aquellos que están soportando aun las consecuencias económicas de la sequía y ven sus costos incrementados por la necesidad de suplementación de raciones y alimentación ante la escasez de pasturas y agotamiento de reservas. La pérdida es notoria y la luz roja de alarma se enciende cuando las previsiones y estimaciones a futuro de las usinas lácteas dan cuenta que el precio estimativo del litro de leche para el mes próximo sufrirá una baja de 10 centavos ($0,10), lo que hace presumir -de confirmarse- que se profundizará el proceso de cierre de tambos por falta de sustentabilidad económica. El senador Michlig puso énfasis en destacar el desánimo de los productores del sector lácteo, una de las actividades más importantes de la estructura económica provincial, y reclamó que se inste al gobierno nacional a respetar lo que ha firmado, 'caso contrario, alertó, nada podrá impedir que día a día se incremente el número de vacas productoras que después de una fuerte inversión del productor para mejorar la calidad de sus rodeos, tengan como destino los frigoríficos porque el tambo ha dejado de ser una actividad rentable'. |