Saliendo de la ciudad de San Salvador de Jujuy, después de pasar por la laguna de Yala y el pequeño pueblo de Lozano, entre los inmóviles cardones que custodian la carretera, las formaciones montañosas van ganando altura y el camino trepa hasta Tumbaya. Unos pocos kilómetros más adelante, en un ensanchamiento de la quebrada, aparece uno de los pueblos entre montañas más pintorescos del país: Purmamarca. Aquí vale la pena visitar la Iglesia consagrada a Santa Rosa de Lima -declarada Monumento Histórico Nacional- que data de 1648.
Para quedarse no faltan opciones de trekking y montañismo. Para seguir, el recorrido en automóvil asciende sobre el nivel del mar (2.460 metros) hasta alcanzar la histórica Posta de Hornillos, y los colores se multiplican mientras otra imagen detenida en el tiempo exhibe al pueblito de Maimará a los pies del cerro conocido como ‘La paleta del pintor‘.
Más adelante, Tilcara presenta el centro comercial y cultural más importante de la zona. Además de la Iglesia erigida en 1797, varios museos conforman un apacible abanico de alternativas para familiarizarse con la cultura regional.