Se trata del alza del 10% que las empresas de medicina privada iban a aplicar a partir de este mes pero que luego frenaron debido a una fuerte oposición del Gobierno Las empresas de medicina privada están a punto de recibir la autorización para aumentar el precio de sus cuotas.
A fines de 2008 habían acordado con el Gobierno un incremento del 10% que comenzaría a regir desde este mes, pero a último momento se decidió dar marcha atrás con la medida.
Ahora, aunque la decisión se terminará de barajar en el despacho del Secretario de Comercio Guillermo Moreno, desde el sector privado aseguran que el incremento es inminente.
“Creemos que será de 5% para febrero, en tanto que el 5% restante quedará para más adelante”, dijo el titular de Swiss Medical, Claudio Belocopitt.
De este modo, el Gobierno le vuelve a cambiar las reglas de juego a las firmas del sector.
Según lo que se pactó a en los últimos meses de 2008 –cuando incluso las empresas ya habían comunicado el incremento a sus afiliados, luego suspendido– el alza del 10% se trasladaría a los primeros meses de 2009, aunque se daría “de una vez”.
Las empresas, desde ya, nada quieren saber con esto, e intentan revertir la idea del desdoblamiento del alza, algo que hoy aparece como poco probable.
Pero aunque las empresas de medicina privada consigan este incremento, sostienen que uno de los grandes problemas del sector es el aumento de sus costos.
“La verdad que con los costos que tenemos, con las subas que nos llegan desde nuestros prestadores de servicios, si nos dan el 5% o el 10%, es anecdótico”, sostuvo Belocopitt.
La otra pata
El martes pasado, las empresas asociadas a la Cámara de Instituciones de Diagnóstico Médico (Cadim) –que agrupa a uno de los prestadores de servicios de las prepagas– se reunieron para conversar sobre el aumento. Uno de los asistentes al encuentro le confirmó a El Cronista que “si está acordado con Moreno sale, y esto ya estaba cerrado en diciembre, por lo que lo esperamos para febrero”.
Otra fuente, que también presta servicios a las empresas de medicina prepaga, en tanto, apuntó en la misma dirección.
“Más allá de que les den o no el aumento, para nosotros es imperioso que recompongan nuestra situación. El año pasado acordamos con los trabajadores incrementos salariales del orden del 25%, pero lo cierto es que todavía no vimos un peso por parte de las empresas de medicina”, argumentaron.
El último incremento autorizado por el Gobierno se había dado en agosto del año pasado, y había promediado un 10%.
El costo de la medicina prepaga es desde hace tiempo una dura pelea entre el Gobierno y las firmas.El sector no está regulado por ley, aunque algunos años atrás se tomó la determinación por parte de las autoridades oficiales de poner un pie en el tema, de modo de evitar que los incrementos sean elevados. Las compañías se quejan de que su rentabilidad no supera el 4%.
Fuente: El Cronista Comercial