Las entidades financieras apuestan nuevamente a las promociones para incentivar a sus clientes. Buscan recuperar los índices que registraban en los 90, antes de la llegada del corralito. Los beneficios promedian el 20% e intentan hacer frente a la suba de precios.
Los bancos arrancan una vez más con la “guerra de las promociones”, a días del comienzo de las clases en el país.
Luego de la experiencia del corralito en 2001, lo que provocó el alejamiento de varios clientes de las entidades, los bancos encuentran en las promociones la forma de tentar a los usuarios para que vuelvan a confiar en ellos.
Las compras necesarias que antecedenten a cada nuevo ciclo lectivo conforman un escenario apto para agudizar una vez más la política de descuentos.
Los beneficios que brindan a los padres en este comienzo de clases logran la recuperación de los ínidices de clientes que contaban en los 90.
Las campañas son bienvenidas por quienes recién llegan de vacaciones y ya tienen un saldo importante que pagar.
Las promociones abren la posibilidad de ahorrar hasta 40 por ciento, con un promedio de ahorro que ronda el 20. De esta manera, los clientes pueden afrontar las subas que se registraron por ejemplo en el rubro librería, que es cercana al 30 por ciento.
Fuente: radiosalta.com
