Dos meses antes del inicio de la pandemia y la cuarentena estricta, Julio Rafel decidió dar un golpe de timón pero el coronavirus cambió todos sus planes y del salón de fiestas que tenía, armó Rafel Slot, la primera pista profesional de Salta en la calle 12 de Octubre 132.
“Al negocio lo cerré el 1 de enero de 2020, la idea era cerrar y armar una librería, pero con la pandemia opté por no hacer nada de eso. Cuando alquilé el local, una chica puso danzas clásicas, pero duró dos meses”, contó a Dossier Web.
Según dijo, Rafel Slot surgió desde la casualidad. “Empezó casi sin querer, tenía el salón de fiestas y tenía la pista de slot, estaba sin explotar el hobbie. Hoy, la idea es proyectarme un poco más. Es la única pista profesional en Salta, no hay ninguna pista como la mía. Vía escala 1-32 el juego, es de cuatro vías con fuentes individuales por vía y con sistema de frenos”.
De intentar alquilar su local a sumergirse en el mundo slot, Rafel dijo: “Armé una pista de slot para gente fanática del juego. Se hace un torneo a nivel local con proyección de hacer un evento más grande. Además de un asador para hacer un evento social para 50 personas con horarios topes. Un lugar para que estés cómodo con tu gente”.
Sobre el parate que tuvo en el inicio de la cuarentena comentó: “Con la pandemia la pasé mal porque me quedé sin alquilar el local. Ahora vamos a ver qué sucede”.
Y dio detalles de lo difícil que es ser emprendedor en la Argentina: “Al hacer un emprendimiento de baja escala económica hay que pensar mucho, es difícil, por los costos económicos. Hay amigos que directamente se fueron del país porque se cansaron. Tengo expectativa que crezca el negocio pese a que es muy complicado, especialmente porque el Gobierno no te da una ayuda económica”.
