Aprovechando la vigencia de un dólar barato, día a día se multiplican los tours de compras a países vecinos, en especial a Chile. Esta situación encendió las alarmas entre los comerciantes de provincias de frontera, que advierten por el impacto que el hecho genera en la actividad local. El turismo, a la par, observa con atención en vísperas de la llegada de la temporada de verano.
De acuerdo a un estudio realizado por el Centro RA de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA), en agosto pasado una persona en Argentina tuvo un costo de vida de casi 5 salarios mínimos, convirtiéndolo en el país más caro de la región.
Protesta de comerciantes de Mendoza
Una de las provincias donde cunde la mayor preocupación es Mendoza. En las últimas semanas, el paso internacional Cristo Redentor fue testigo de extensas filas de micros que transportaban a compradores argentinos. Ante esta situación, la Federación Económica de Mendoza (FEM) emitió un comunicado titulado “Preocupación por la caída del consumo y el contrabando de productos en Mendoza”, en el que da cuenta de la merma que atraviesan diversos sectores de la economía.
A la par, la FEM hace énfasis en los “tours de compras, que no solo se destinan al consumo personal, sino que han dado lugar a una práctica ilegal de contrabando hormiga, mediante la cual productos adquiridos en Chile son introducidos al país de forma irregular para luego ser comercializados en ferias y redes sociales”. “Esta práctica no solo afecta a los comercios legales, sino que también genera una competencia desleal que pone en riesgo la sostenibilidad de las PYMES productoras locales”, denuncia.
El comunicado también critica “la llegada de productos desde otros países limítrofes, como Bolivia, Brasil y Perú a través de canales informales”, que “está incrementando la presión sobre el comercio local”.
A modo de cierre, solicita de manera urgente que las autoridades provinciales y nacionales “implementen medidas concretas y específicas para controlar el tránsito de los tours de compra, con el consecuente ingreso de mercaderías a nuestro país, que son una clara evidencia de actividades comerciales irregulares, generando una competencia desleal con quienes realizan actividades lícitas y pagan sus impuestos”.
“Solicitamos que se refuercen los programas de financiación para PYMES, a fin de mejorar la competitividad de los comercios mendocinos y permitirles enfrentar de manera más efectiva esta situación de desigualdad comercial. Del mismo modo, consideramos fundamental promover el consumo local, instando a la ciudadanía a apoyar a los comercios de Mendoza, contribuyendo al fortalecimiento de la economía provincial”, finaliza.
Turismo, a la espera de la temporada de verano
Otro de los frentes donde se mira con lupa la situación es el turismo. En el sector temen que lo que ocurre actualmente con el consumo tenga réplicas en la temporada de verano y que los viajantes locales se inclinen por destinos extranjeros aprovechando la apreciación del peso argentino.
“Cada algunos años nos pasa. Cuando está la oportunidad de comprar más barato en Chile, la gente va a dos o tres días, hace las compras, come rico y se vuelve. Lo mismo nos pasaba hasta el año pasado con los chilenos, que hacían invasión de compras, comían rico acá y se volvían”, explicó el secretario de Turismo de Bariloche, Sergio Herrero, a Ámbito.
Al respecto, el funcionario comentó que “cuando uno tiene la cabeza en veranear en algún lado, a lo mejor será más austero, le quitará unos días a la estadía, pero cuando uno quiere ir a algún lugar y lo tiene en su cabeza, va. Si llega a ser mucha la diferencia, ya es otra historia. Esperemos que no”.
“Estamos trabajando para que los hoteleros concienticen y bajen los precios; para que la Cámara de Comercio empiece a pedir promociones con tarjetas y devoluciones. Estamos llevando a cabo un plan con vuelos y con las “low cost” con precios especiales, como el nocturno que saca Aerolíneas Argentinas en diciembre. Tres aerolíneas de Chile van a volar a Bariloche todo diciembre, enero y febrero”, concluyó .
Otra provincia patagónica que comparte frontera es Santa Cruz. Su capital, Río Gallegos, cuenta con una zona franca inaugurada en 2021, lo que genera que la población local tenga acceso a determinados productos a un menor costo. No obstante, el tráfico entre Argentina y Chile es continúo. “Viajan a comprar muchos santacruceños, pero también vienen muchísimo chilenos porque allá es muy cara la comida. Todo el tiempo hay chilenos circulando en Río Turbio, El Calafate, 28 de Noviembre, Río Gallegos”, indicaron desde la provincia.
En ese sentido, señalaron que las diferencias cambiarias no suelen traducirse en una pérdida de turismo santacruceño ni chileno, sino que el intercambio es permanente, como ocurre también en Tierra del Fuego: “Esta situación incluso nos da una dinámica distinta. Es un ida y vuelta. Nosotros por ahí vamos a comprar alguna cosa por el precio que tiene y ellos vienen acá a consumir cosas de supermercado”.