El fabricante de vehículos norteamericano Chrysler está confiado en recibir u$s3.000 millones adicionales de parte del gobierno de EE.UU. para poder sobrevivir, señaló el jefe de la compañía en el Salón Anual del Automóvil de Detroit. El CEO de la empresa, Robert Nardelli, se mostró confiado en que Chrysler recibirá la segunda parte de un rescate financiero de u$s7.000 M, que depende de una reestructuración en el tercer mayor fabricante de vehículos en los Estados Unidos, luego de haber recibido u$s4.000 M de ayuda del gobierno en enero, que utilizó para pagarle a empleados y proveedores, entre otros.
En tanto, General Motors (GM) no logra avanzar con rapidez en la decisión sobre el futuro de su filial sueca Saab y la marca de vehículos todo terreno Hummer.
Estas cuestiones requieren tiempo y no se resolverán probablemente hasta antes de marzo, dijo el jefe de GM Rick Wagoner en la feria.
Según reportes de los medios, GM no encuentra un comprador para Saab, con amplias pérdidas, ni para la marca Hummer, que también tiene problemas.