Delfina Álvarez cerró la temporada de triatlones en nuestro país con una consagración en el Campeonato Argentino disputado en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay y se dio el enorme gusto de ser la mejor del país.
La deportista salteña había clasificado a esta “Gran Final” en diciembre de 2016 en los Juegos Argentinos de playa, en Río Negro y sabía que esta era la oportunidad para buscar la corona. Le bastaba con ser segunda, pero hizo una competencia brillante y arrasó en su andar.
Primero con los 800 metros de nado en el río Uruguay, con corriente a favor, donde concluyó detrás de Moira Miranda de Chubut, con un tiempo de 11 minutos y 17 segundos. Luego vino la transición a la bicicleta (20 km) en donde se adueñó de la primera colocación y no la soltó más, con 34 minutos y 10 segundos. Y para concluir se dieron los 5 k de pedestrismo y utilizó 20 minutos con 34 segundos. Por eso fue la ganadora con una hora, 6 minutos y 1 segundo.
Desde Buenos Aires, Álvarez, donde descansa después de la carrera dialogó con LA GACETA y expresó: “sabía que era un circuito muy rápido, técnicamente favorecido, con bastante viento, principalmente en la segunda vuelta de bici y de pedestrismo. Es la primera vez que la ganó y sentí que el trabajo que venimos haciendo viene por buen camino y quiero agradecer a la gente que aporta esto”
En el pasado mes de enero había triunfado en la fecha del triatlón de La Paz, también en Entre Ríos http://www.lagacetasalta.com.ar/nota/72096/deportes/delfina-lvarez-gano-triatlon-paz-suena-juegos-olimpicos.html y le había su sueño de estar en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio en Japón.
Su calendario de actividades seguirá a mediados del mes de julio con carreras internacionales, con fechas continentales, una en Iowa, Estados Unidos y otra en México. El próximo paso a nivel selección argentina serán los ODESUR en Bolivia y los Panamericanos en Lima, Perú.
Así fue como la salteña Delfina Álvarez puso su nombre y el de Salta en lo más alto de esta disciplina en el país. Y todavía le queda mucho por recorrer.
Fuente: La Gaceta