El fin de semana largo por el feriado del día de la Soberanía generó un impacto económico de $ 11.690 millones, movilizó casi 4 millones de personas en todo el país y fue el mejor “en los últimos cinco o seis años”, según los cálculos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que coincidió con el Ministerio de Transporte en destacar que el movimiento fue aproximadamente un 25% superior que el de 2018 y 2019, antes de la pandemia de coronavirus.
De acuerdo con el relevamiento de la CAME, entre el viernes y el lunes se movilizaron 1.390.000 turistas, 26,4% más que en el mismo fin de semana largo de 2019, con un gasto diario de $ 2500 per cápita, una estadía media de 2 días y medio y un gasto total de $ 8.687,5 millones, un 17% más que hace dos años cuando se quita el efecto inflación.
A ellos se suman 2,5 millones de excursionistas -personas que fueron de una ciudad a otra a pasar el día-, un 24,1% más que en 2019, con un gasto promedio de $ 1200 per cápita, y un desembolso total por unos $ 3000 millones, 29,8% más que en 2019 a precios constantes.
“Este fin de semana fue el mejor de noviembre de los últimos cinco o seis años (…) La verdad es que fue muy satisfactorio, con muy buenos resultados” que dejan “un balance muy bueno y perspectivas alentadoras para la temporada de verano“, resumió el secretario de Turismo de CAME Gregorio Werchow, en declaraciones a la agencia Télam.
Los números fueron celebrados también desde el Ministerio de Transporte que dirige Alexis Guerrera, que destacó que las capacidades hoteleras están colmadas y se produjo un récord de venta de tickets para los principales destinos. “Es una gran noticia la reactivación del turismo en todo el país, que significa a su vez que se dinamice la economía, y que millones de argentinos y argentinas utilicen para movilizarse los distintos modos de transporte, con servicios de calidad, eficaces y rápidos. Estábamos esperando hace mucho tiempo este momento y trabajamos con mucha responsabilidad para que fuera posible”, apuntó el ministro.
Algunos de los destinos más elegidos fueron las ciudades del Partido de la Costa, Mar del Plata, Bariloche, Puerto Iguazú, Villa Carlos Paz, Mendoza, Salta, Ushuaia, El Calafate, San Martín de los Andes, Puerto Madryn, San Rafael, Villa La Angostura, Merlo y Concordia, Entre Ríos, poblada por el Torneo Nacional de Hockey.
La provincia de Buenos Aires albergó a la mayor parte de la gente que viajó y los niveles de ocupación rondaron entre 85% y 95%, con picos en Pinamar, Cariló, y un buen fin de semana en Mar del Plata. En Santa Fe, Reconquista, Rosario y la capital tuvieron una ocupación del 90%; y en la región sur, Villa Constitución colmó su hospedaje al 100% en cabañas, 50% en casas quinta y 30% en campings. Entre Ríos alcanzó una ocupación que promedió el 95%; Mendoza recibió unos 35.000 turistas con una ocupación hotelera promedio de 93% en las principales ciudades turísticas; y en Córdoba la ocupación promedió el 90%, con picos de 96% en Villa General Belgrano y 90% en Almafuerte, en el Valle de Calamuchita.
“El aumento importante se debe no solo a que viajó más gente, sino a que la estadía este año fue levemente mayor. Todas las ciudades con mar se vieron muy transitadas para lo que suele ser esta época del año, lo que anticipa una buena temporada de verano”, sostiene el informe de CAME, que apunta específicamente que como “las familias aprovecharon la escapada de dos o tres días para realizar sus reservas del verano (…) lo que más se ocupó fueron los hoteles de 3, 4 y 5 estrellas y no tanto las cabañas y departamentos”.
Werchow, en tanto, destacó que “este fue el primer fin de semana donde ya se hizo uso de los beneficios del Previaje“, a la que calificó como una herramienta “extraordinaria”. Al día de hoy, 2,5 millones de personas sacaron su viaje con el programa, con una facturación total de $ 49.000 millones.