El Índice de Capacidad de Pago de Argentina (ICPA) que elabora el Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano, experimentó en setiembre una baja del 10,8% respecto de agosto y de un 50 % con respecto a setiembre de 2008.
El licenciado Víctor Beker, director del CENE, destacó que el descenso registrado es el resultado de la profundización en la caída en el superávit fiscal, que llegó a apenas 58 millones de dólares en setiembre, muy lejos de los 1.146 millones de igual mes de 2008.
El "Efecto Jazz", del que en su momento se dijo que "no nos afectaba" a los argentinos, estimuló el descenso del superávit de la balanza comercial, que ya alcanzó el menor valor de 2009. Al respecto, destacó Beker que con los valores de setiembre último, el ICPA ha regresado a niveles similares a los del segundo semestre de 2003. El tipo de cambio real sufrió también una caída, mientras que el nivel de reservas del Banco Central es la única variable que tuvo un aumento, concluyó Beker. Optimismo oficial Pese a todo, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, aseguró durante el primer informe que realizó ante el Senado que la Argentina no tendrá "ningún inconveniente" para cumplir en tiempo y forma con el pago de los compromisos asumidos, al tiempo que dijo que el ajuste selectivo en las tarifas dispuesto en octubre pasado, tras cinco años sin aumentos, permite que un importante número de hogares "quede exceptuado". "Este año, en el peor contexto internacional, hemos pagado 21.000 millones de dólares. Para este segundo semestre debemos enfrentar pagos por 1260 millones de dólares, y todos los indicadores muestran que no habrá ningún inconveniente para cumplir con lo indicado", aseguró Fernández.
El funcionario abrió su exposición dando cuenta del proceso de reducción de deuda que llevó adelante el Gobierno, "a partir del pago de sus obligaciones, exitosos canjes, y reconversión" de los títulos. Así, según explicó Fernández, la deuda externa paso "de ser el 62 por ciento del Producto Bruto Interno" en 2002 "al 42 por ciento" en la actualidad, aunque no mencionó el monto total de dicha deuda. Pero, además, Fernández enfatizó que "solo el 38 por ciento" del total de la deuda se encuentran en manos de tenedores privados, y el resto en organismos públicos del propio Estado argentino, provincias, y organismos internacionales de crédito. Este 38 por ciento en manos del sector privado "es similar al que mantienen otros países", como Estados Unidos, dijo Fernández.
