Los casting publicitarios son uno de los termómetros comerciales que genera las primeras señales de un freno en el crecimiento económico. Y así lo demuestra el momento que vive el sector.
“No hay trabajo, nos cayó un 70% la actividad”, aseguró Horacio Devitt, de El Círculo Casting. “Los actores nos llaman todo el tiempo, pero no hay actividad. Estamos como en 2001”, sentenció el especialista que lleva 25 años trabajando en el segmento de la publicidad.
Esta época del año es un momento de mucha actividad. Por el lado de las marcas locales, se acercan las Fiestas y buscan aprovechar un momento de mayor consumo. Para las internacionales, la contraestación les ofrece en la Argentina lugares para filmar. Sin embargo, el negocio es casi nulo.
Entre noviembre y marzo de 2007, Sudamericana había realizado ocho comerciales para el exterior. “Entre enero y marzo se trabaja mucho, pero ahora se frenó todo. Había propuestas ya cotizadas que no se van a hacer. Es muy contado el trabajo que hay”, dijo Alejandro, director de Sudamericana de Publicidad.
Un caso que refleja la caída abrupta es el de la firma CanoPiacentini. Situada en Bariloche, el 90% de sus trabajos son para el exterior. “El año pasado, para esta época, teníamos 20 consultas y estábamos haciendo dos comerciales. Este año, no tenemos ninguno confirmado”, explicó Carlos Piacentini, director de la firma sureña.
“La Argentina está cara y no podes filmar”, aseguró Alfredo Igartua, de Universal Gold Casting. El director de la compañía de casting más grande del país le dijo a El Cronista que, además de la inflación, los costos de las locaciones cotizan “igual que en Los Ángeles”. “El alquiler de una casa puede salir u$s 3.000 para grabar un comercial”.
En Bariloche, el costo aumentó 100% en los últimos años. Una camioneta para 14 pasajeros tenía un costo de $ 350 en el 2005; hoy, tres años más tarde, cotiza el doble, $ 700.
Pero quizás el costo que más sufren los empresarios del sector es el laboral. Casi por unanimidad, las empresas se refirieron al incremento en el caché de los actores.
El precio promedio para dos días de trabajo para una publicidad, con los derechos incluidos, era de $ 600 protagonista, $ 500 coprotagonista, $ 500 secundarios, $ 326 menores, $ 292 grupal y $ 132 bebés.
A partir del 17 de septiembre de 2007, La Asociación Argentina de Actores, “que hoy ocupa un rol de representante”, impuso que los precios sean, sin derechos y por un sólo día, $ 1400 protagonista, $ 1.167 coprotagonista, $ 761 secundario,
$ 681 personaje menor y $ 308 por grupo. A esto hay que agregarle 10% del día del jornal para tener exclusividad –si los utiliza una marca, no los pueda utilizar la competencia– $ 100 por prueba de vestuario, $ 331 cada hora extra y una extensión de derechos por cada país en el que se va a pasar la publicidad.
Otro inconveniente son los plazos. En Buenos Aires obtener una habilitación para filmar puede durar cinco días hábiles, y en la provincia 72 horas hábiles.
Por último, explican a coro las empresas consultadas: “Desde hace un año que estamos alrededor de un 20% más caros que Chile y Uruguay, mercado que se está llevando mucho trabajos que antes se realizaban acá, y a eso se le suma que no tienen tantos problemas con los sindicatos”.
Fuente: El Cronista
