Con la menor producción en 23 años a causa de la sequía, el complejo de soja aportaría US$7.300 millones menos que en 2022, lo que significa una reducción del 30% interanual, según estimó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
De hecho, las posibles 25 millones de toneladas que se esperan producir marcarían la menor cosecha desde la campaña 1999/20.Por lo tanto sería el peor registro de la soja argentina en el siglo XXI, tanto en producción como en exportaciones.
“En total, según nuestras estimaciones, las exportaciones del complejo de soja podrían ubicarse en torno a las US$17.568 millones” describió el reporte de la BCR.
La soja es la principal oleaginosa sembrada en Argentina, concentrando una participación en torno al 90% del área total de los principales cultivos de esta variedad, como girasol, colza, lino y maní.
La soja pierde terreno frente al maíz
Desde la década del ‘90, la soja venía siendo el principal grano en la producción nacional de forma indiscutida. Sin embargo, en los últimos años ha sido destronada del primer puesto.
“En el pasado reciente se viene observando una progresiva caída en el área destinada al cultivo, siendo sustituido principalmente por el maíz, pasando este último a ocupar la primera posición en producción desde la 2019/20″, señaló el reporte.
Esta tendencia se repetirá en la campaña actual, aunque con niveles de producción inferiores al promedio de las últimas campañas debido a la grave sequía, con 35 millones de toneladas de maíz contra 25 millones de soja proyectadas en el actual ciclo agrícola, según estimó la BCR.
En la actual campaña, se estima que se sembraron 16 millones de hectáreas de soja, ubicándose apenas unas 100.000 por debajo del ciclo anterior.
La soja sigue siendo el cultivo más sembrado, pero con una tendencia a la baja
“La oleaginosa se mantiene como el principal cultivo en área sembrada en el país, aunque mostrando una caída ininterrumpida en las últimas 7 campañas desde del récord de las 20,3 millones de hectáreas que se sembraron en la 2014/15″, señaló la BCR.
“El área destinada al cultivo en la 2022/23 representa la menor área sembrada con la oleaginosa desde la 2005/06″, consignó el reporte.
Récord de exportaciones en 2022 y la influencia del “dólar soja”
En el último año, el complejo sojero generó exportaciones por un total de US$ 24.868 millones, lo que marcó “un récord absoluto en valor exportado”.
Incidió en este registro las medidas implementadas por el Gobierno nacional, como el “dólar soja” uno y dos, que el Gobierno volverá a implementar en los próximos días.
“La harina de soja es por lejos el principal producto exportado dentro del complejo y el de mayor relevancia en materia de exportaciones de bienes en el país. De hecho, su aporte por sí solo es superior a todos los otros complejos exportadores individualmente. Tan solo en harina de soja se exportaron US$12.041 millones en 2022, un 14% del total nacional en bienes”.
En 2023, como consecuencia de la fuerte caída en la producción que generará una merma en los volúmenes de molienda y en el saldo exportable en la campaña, se espera “un severo ajuste” en las exportaciones del complejo.
De hecho, tal como lo informó TN, el país podría perder el primer puesto ante Brasil en lo que respecta a los envíos al exterior de harina de soja.
Con una merma del 50% interanual, los envíos al exterior del poroto son los que mayor caída concentrarían en términos porcentuales, producto de dos factores: el bajo volumen de producción será mayormente encausado a la industria este año y los márgenes actuales favorecen la exportación de productos industrializados más que a los despachos al exterior de poroto sin procesar.
“Las exportaciones de aceite podrían caer hasta un 40% producto de la caída en volúmenes y a los menores precios de exportación actuales. Por el lado de la harina y los subproductos, la caída de las exportaciones en dólares estaría en el orden del 18%, proyectándose una merma en exportaciones de biodiesel del 28% entre años”, señaló el informe.