La investigadora Amy Austin fue premiada con el Premio Internacional L’Oréal- UNESCO por estudiar la ecología de ecosistemas y el impacto humano en la Patagonia.
Amy Austin, Dra. en Ciencias Biológicas de la Universidad de Stanford e investigadora del CONICET fue galardonada con el Premio Internacional L’Oréal-UNESCO “Por las Mujeres en la Ciencia” por América Latina. Es la primera ecóloga en ser premiada y si bien nació en Seattle, Estados Unidos, llegó a la Argentina en 1997 para una estadía postdoctoral financiada por la National Science Foundationy nunca más se fue. En estos 20 años, radicada en Capital Federal pero con estadías de varías veces al año en San Martín de los Andes y el Parque Nacional Lanin, se ha dedicado al estudio de la ecología de ecosistemas y el impacto humano en la Patagonia.
“Es un honor enorme de haber sido elegido como laureada de este premio. Ver resaltados nuestros trabajos de investigación en la Patagonia y los ecosistemas de Argentina me trae una gran alegría, y el hecho que la ecología de los ecosistemas esté reconocida por primera vez entre las galardonadas es particularmente gratificante para mí. Espero que la mayor visibilidad de las mujeres en la ciencia que aporta este premio pueda atraer a más mujeres jóvenes a seguir una carrera científica y tal vez incluso a la ecología de campo, porque buena ciencia no se trata siempre de estar en un laboratorio”, dijo Austin a CONICET tras recibir la noticia. En diálogo con Mujeres Que Hacen, Austin contó acerca de su investigación.
¿En qué consiste tu investigación?
Estudio cómo funcionan los ecosistemas terrestres y cómo es el impacto humano en ellos, para entender, brindar información y ayudar a concientizar. Algunos ejemplos del impacto de la actividad humana es la deforestación por el ganado en los suelos o los combustibles fósiles que contribuyen al cambio climático.
¿Cuáles crees que son los principales desafíos de América Latina en cuanto al impacto humano en la naturaleza?
Creo que uno de los desafíos que tiene América Latina – y el resto del mundo también- es llevar adelante el crecimiento económico sin aumentar las emisiones. Un ejemplo positivo es China, donde la inversión en energía renovable como industria está creciendo muchísimo.
¿Por qué crees que es la primera vez que se premia a una ecóloga?
Me parece que lo que pasa es que los seres humanos se preocupan por lo que tiene impacto directo para ellos como las enfermedades, que obviamente es un tema muy interesante e importante. Lo que pasa con una ecología es que se trata de entender qué pasa con el planeta y es importante para buscar soluciones a futuro, por eso celebro que se la reconozca.
¿Cómo ves hoy la situación de las mujeres en la ciencia?
En los 20 años del premio, los obstáculos y desafíos han cambiado y ha servido para dar visibilidad. Hoy principalmente estamos tratando de que las mujeres lleguen a lugares más altos jerárquicamente. Antes había discriminación directa y ahora en cambio las mujeres muchas veces reciben discriminación más sutil, muy relacionada a la cultura, que no hay que minimizar sino buscar soluciones y para mí el lugar es la educación, mostrar que las mujeres pueden hacer lo que quieran.
Fuente: apertura.com