Hoy se publicó en el Boletín Oficial este decreto que pone en vigencia la jubilación anticipada, una medida que tomó el gobierno nacional tras la dura derrota en la Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), sin embargo, lo que se busca es acobijar a personas que tengan 30 años de aporte y que durante la pandemia quedaron desempleados.
En diálogo con Dossier Web, Ernesto Martínez ex titular de la ANSES contó que esta medida alcanzaría al menos a 30.000 personas de las cuales el 90% son hombres. “Se trata de personas que ya tienen los 30 años de aporte pero que no la edad y estén en situación de desempleo”.
Se entiende que son jóvenes para jubilarse pero que, a raíz de la pandemia, “no están pudiendo reinsertarse en el mundo laboral tras los peores coletazos de la pandemia”.
En la Argentina ya existe un antecedente de un hecho similar y se dio entre el 2005 y el 2007, “ahora por el lapso de dos años, los que califiquen recibirían el 80% de la jubilación hasta tanto cumplan con el requisito de la edad, es una medida que tiene una idea de proteger, se trata de personas que muchas veces están desalentadas en la búsqueda de trabajo porque cuando uno mira los datos de actividad económica se puede ver una reducción muy grande el año pasado, hablamos de aquellos que trabajaban y buscaban trabajar”.
El especialista considera que si bien muchos ven esta medida con algo meramente electoral y que busca revertir los resultados de las elecciones, de cara a las Generales del 14 de noviembre, la realidad es que ese sector está pasando un mal momento, “su gran mayoría tienen hijos adultos, y por ende quedaron fuera de todas las políticas de infancia y niñez como por ejemplo la Tarjeta Alimentar y la Asignación Universal por Hijo, además hablamos de personas que tienen más de 30 años de servicio, ya están en condiciones de hacerlo”.
Esta medida viene de la mano de otra que busca beneficiar a mujeres que puedan conseguir sus aportes tras el cuidado de personas, en este caso de los hijos, sobre esto Martínez explicó que “está vigente desde agosto, es un esquema muy novedoso para Argentina aunque ya existe en América Latina como Uruguay, hay tareas como la de cuidar a los hijos que están fuera del mercado, por eso vemos tantos casos de que las mujeres en promedio les ha costado más acumular los años de servicio que se piden, es algo que me parece interesante”, sobre esto destacó que a nivel país ya hay 50.000 solicitudes y se estima que los primeros cobros lleguen en octubre.
Finalmente, y consultado por la posibilidad de la entrega de un cuarto IFE y su impacto aseguró que la situación actual no es la misma que se vivió en el 2020, “no creo que sea de características tan similares a las del año pasado, se piensa en alguna otra herramienta, si bien a pandemia ha retrocedido mucho hay sectores que necesitan ponerse en pie, creo que será algo menos masivo porque se alanzó a nueve millones de beneficiarios”.