Hasta no hace mucho, a la hora de comprar una computadora portátil sólo existía una opción: la notebook. Un dispositivo con las mismas características que una PC de escritorio, pero condensado. Hoy una nueva variante generó un boom de compras e impulsó, en medio de la crisis, al mercado tecnológico en el país. Se trata de las netbooks, dispositivos que rápidamente llamaron la atención de los consumidores, no solo por su tamaño, sino también por su precio. Si bien en la Argentina las ventas de computadoras cayeron casi 20% interanual en lo que va de 2009, las compras de portátiles crecieron más de 12%, en gran medida gracias a las netbooks, que representaban el 6% del negocio en enero y treparon al 17% en julio, según un informe realizado por fK Retail and Technology.
En un primer momento, las netbooks aparentan ser iguales a las notebooks en prestaciones, pero más pequeñas y baratas, una relación difícil de resistir para el comprador. Sin embargo, cuando se realiza un análisis más extenso, se desprende que ambos dispositivos fueron concebidos con fines disímiles.
Mientras que las notebook fueron desarrolladas para producir contenidos, las netbooks están pensadas para consumirlo. Son ideales para navegar en Internet, utilizar programas de mensajería instantánea, procesador de textos o incluso reproducir música y cierto formatos de videos. Sin embargo, su utilidad se ve acotada a la hora de abrir más de un programa a la vez o de usar softs más potentes.
En cuanto a las diferencias físicas, lo primero que salta a la vista es el tamaño del display. En las netbooks tiene un rango que varía entre las 7 y las 12 pulgadas. En cambio, entre las notebook la media más común es de 15 pulgadas, pero llegan a 22 o más en casos extremos.
También utilizan procesadores distintos, los de las netbooks son de menor potencia y tienen una performance más austera. Por otra parte, no cuentan con reproductores de DVD o Blu-ray. En cambio, tienen lectoras de memorias y su punto fuerte es la conectividad, con wifi, Bluetooth o 3GP, las netbooks brindan la posibilidad de acceder desde cualquier lugar a la Web.
Si bien las netbooks son más acotadas para realizar ciertos procesos, esto no va en detrimento de algunas características muy interesantes para trabajar. La extrema portabilidad es su punto fuerte; llegan a pesar no más de un kilo y medio, lo cual les permite ser un dispositivo de muy fácil manejo. Además, traen webcam y micrófono incorporados, lo que las convierte en una buena herramienta para realizar videollamadas.
Algunos modelos incorporan una salida para monitor, de gran apoyo al momento de realizar presentaciones, siempre y cuando los archivos no sean muy pesados. Así, por una fracción del peso de una notebook se obtiene un centro de comunicaciones completo.
En cuanto a capacidad de almacenamiento, en un principio las netbooks utilizaban memorias sólidas de poca capacidad, sin embargo hoy la mayoría trae rígidos tradicionales que pueden almacenar 120 o 160 GB.
No obstante, estas ventajas pueden diluirse al momento de pensar en el tiempo que dura la carga de la batería. Todavía las notebooks le sacan una luz de ventaja a sus nuevas contendientes en el mercado, que tienen en promedio dos horas y media de autonomía.
Por otra parte, en muchos casos las pequeñas pantallas de las mini pueden resultar engorrosas para lecturas extensas e incluso muy incómodas para quienes tienen problemas de visión.
En conclusión, las netbooks no cubren aún el amplio espectro que las notebooks manejan y por ello no tienen las capacidades para funcionar como único equipo. Son un muy buen complemento para una computadora de escritorio o una portátil no tan portátil, e ideales como dispositivo de viaje.
No obstante, diversas empresas han desarrollado lo que denominaron mini-notebooks. Estos dispositivos, que llegarán al mercado a fines de este año o a principios de 2010, prometen potencia similar a la de una notebook, pero en tamaño netbook. Con procesadores más potentes, mayor cantidad de memoria ram e incluso con chips de video capaces de reproducir imágenes en Alta Definición (HD), las mini-notebooks generarían la segunda revolución en el mercado de las portátiles en menos de dos años.