Debido a una medida municipal que no respeta derechos preexistentes, hoy Movistar está impedida de realizar mantenimientos en la radiobase de la que depende el servicio en Güemes y localidades cercanas.
La situación pone en grave riesgo los servicios brindados a los clientes, quienes podrían quedar sin cobertura. Por ello la firma recurrió a la Corte Suprema de Justicia de la Nación para hacer respetar el derecho de los usuarios y de la compañía, a pesar de lo cual en el día de la fecha el servicio se encuentra completamente interrumpido.
El problema encuentra sus antecedentes en el año 2009, cuando Movistar pidió y consiguió autorizaciones para colocar antenas para telefonía móvil en la localidad de General Güemes, en la provincia de Salta. Al poco tiempo, la municipalidad cambió la normativa referente a la distancia mínima que debía guardar una antena de telefonía de las viviendas, ya que las emisiones podrían resultar nocivas.
Las antenas colocadas por Movistar quedaron por fuera de lo establecido, ya que se encontraban a menos de 500 metros de las viviendas. La compañía recurrió a la Justicia, la cual estableció tras las pericias correspondientes que los artefactos estaban colocados dentro de los parámetros de las normas federales para exposición de ondas electromagnéticas.
En febrero de 2016, la Cámara Federal encomendó a las compañías y al municipio la elaboración de un plan de relocalización para emplazar la antena que generó el conflicto en un nuevo sitio, apto para la prestación eficiente del servicio. En junio de ese año, y no obstante haber recurrido esa decisión de la Cámara, Movistar elaboró y propuso a la Municipalidad de General Güemes diversos planes técnicos y proyectos de mudanza, pero no obtuvo respuesta alguna hasta hoy.
Ante la situación, y existiendo altas probabilidades de caídas del servicio en esa localidad, Movistar presentó inmediatamente una nota ante el ENACOM y otra ante el Juzgado de Faltas de la Municipalidad de General Güemes, reclamando por la arbitrariedad y por el incumplimiento, por parte del municipio, de coordinar con la compañía un plan de relocalización de la antena, lo cual había sido ordenado por la justicia federal hace tres años.
Finalmente, y como era previsible, pocos días atrás se produjeron fallas en los equipos que integran la antena imposibles de resolver en forma remota. Por lo tanto, el servicio se interrumpió totalmente. Como consecuencia, esta interrupción generó, además, afectaciones y posteriores caídas de servicio en otras dos localidades cercanas a General Güemes, que dependen de la antena mencionada para la cobertura de señal.
La situación en General Güemes y en las otras dos localidades es grave: al no haber servicio telefónico hay servicios esenciales para la comunidad que se han quedado sin cobertura, tales como hospitales y bomberos, entre otros. El litigio aún no tiene resolución, y la compañía recurrió ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.