Más de la mitad de los nuevos empleos creados este año fueron en el sector público. El empleo estatal sostuvo el nivel de ocupación en el primer semestre del año, cuando el Estado creó 90 mil puestos, y evitó así que la tasa de desocupación marcara 9,4 en lugar de 8,6%
Así lo indicó el Instituto para el Desarrollo Social de la Argentina (Idesa), que evaluó que “los datos confirman un importante deterioro en la situación laboral que se refleja no tanto en aumento del desempleo como en caída en la calidad de los empleos”.
Señaló que “una evidencia concreta es que el sector público fue el principal generador de empleo en el último año”. “Esta dinámica laboral, más la masificación del asistencialismo a través de la asignación asistencial por hijo, llevan a una situación donde tiende a desaparecer la cultura del trabajo y del esfuerzo y crece la improductividad”, advirtió el informe.
Tomando la información correspondiente a los grandes aglomerados urbanos de todo el país, suministrada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), entre el primer semestre de 2008 y el mismo período de 2009, el crecimiento de la fuerza laboral fue de 133 mil nuevos trabajadores.
Del análisis surge que durante ese período 53 mil de los nuevos trabajadores no consiguieron empleo con lo cual pasaron a engrosar la tasa de desempleo que pasó desde 8,2 a 8,6%, señaló el Instituto que conduce el economista Jorge Colina.
Sin embargo, 80 mil consiguieron empleo, de los cuales aproximadamente 75 mil son nuevos asalariados formales mientras que 5 mil son informales.
Los 75 mil nuevos asalariados formales fueron el resultado de un incremento de 90 mil nuevos empleados públicos y una reducción de 15 mil trabajadores en empresas privadas.
“Los datos confirman las evidencias que se venían detectando respecto del deterioro del mercado laboral. El problema no sólo radica en el fenómeno ya conocido de aumento del desempleo sino que las ocupaciones que más crecen son el empleo público y los empleos por cuenta propia”, destacó el informe.
Así concluyó que “si el Estado no hubiese dado empleo público a toda esta gente, la tasa de desempleo en el primer semestre de 2009 habría sido de 9,4% en lugar de 8,6%”.
“Esta dinámica laboral pone en evidencia una economía en decadencia. Prueba de ello es que el empleo aumenta pero el sector público muestra cada vez menos eficacia en desempeñar roles vitales de regulación, control y provisión de bienes públicos. El deterioro de la educación, la salud pública, la seguridad y la justicia constituyen ejemplos muy ilustrativos”, sostuvo el análisis.Region Norte Grande