Hoy cerró a $1205 para la compra y a $1255,00, lo que marcó un nuevo máximo nominal, y acumula un alza de $35 en los últimos dos días, en tanto que la brecha con el oficial se ubicó en 52,7%, otro récord del tipo de cambio paralelo en la era de Javier Milei, ya que es la más alta desde la devaluación. Y lo más preocupantes es que estas alzas son otro paso en una escalada que lo llevó a avanzar nada menos que $100 la semana pasada. En esta nota, un detalle de por qué sube y cuál puede ser el techo.
Las razones por las que sube el blue:
La incertidumbre política
“Todo estos movimientos del dólar blue se deben a la gran incertidumbre que genera el debate de la ley ómnibus”, opina el economista Federico Glustein.
Desde Eco Go, la economista Rocío Bisang coincide en que “son días complejos en términos políticos por todo lo relacionado a la ley ómnibus, pero también por el paro convocado para este miércoles 24 de enero”. Señala que combinan varias cosas, pero particularmente las dos mencionadas, que esta semana suman incertidumbre a lo económico.
Y es que la suba del dólar blue de estos últimos días se da en un marco en el que el oficialismo presentó el proyecto de ley ómnibus, que busca un cambio radical de la Argentina, modificado en línea con lo que pidió la oposición y espera su tratamiento. Eso coincide con que el mercado está alerta a cómo será el desarrollo del paro general previsto para este miércoles 24 de enero, impulsado por la Confederación General de los Trabajadores (CGT) en contra de las medidas que impulsa el Gobierno por medio de esa ley y el Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023.
“Ante esta incerteza, la gente busca mayor seguridad en la moneda estadounidense, lo que genera demanda precautoria y lo empuja al alza”, opina Glustein.
Menor demanda de pesos
Por su parte, para Andrés Reschini, analista de F2 Soluciones Financieras, apunta que “la demanda de pesos sigue en caída y que, con tasas negativas, los ahorristas se ven en un brete y muchos están obligados a ir hacia los dólares”. Esa es una de las razones por las que está subiendo el blue en los últimos días, según su mirada.
Y esa tendencia de los ahorristas se combina, según Gustavo Quintana, de PR Operadores de Cambio, con el hecho de que “en enero se revierte la estacionalidad de la demanda de pesos”, que pasa a ser oferta, es decir, hay pesos y tienden a ir hacia el dólar blue por falta de instrumentos interesantes de ahorro, con una tasa del plazo fijo tradicional que está en el 9% mensual contra una inflación del 25,5%.
El dólar tarjeta y un tipo de cambio oficial pisado
Por otro lado, Quintana menciona que “dado que el dólar tarjeta está arriba de los $1.380, induce a pagar gastos con dólar blue”, lo que le mete presión a la plaza también.
Asimismo, Bisang menciona que “empieza a haber un cambio en las expectativas de devaluación, con un crawling peg que, moviéndose al 2%, que se queda corto frente a la inflación”.
En ese sentido, el economista Pablo Ferrari señala que “se asiste a una tendencia alcista, tanto en el ilegal como en los financieros, producto de un tipo de cambio oficial, que está casi pisado, en una economía con una inflación elevada, cuyo último empujón fue el gran aumento del tipo de cambio oficial para acercarse a la cotización de los paralelos en diciembre”.
En síntesis, considera que “el blue sube al ritmo de la inflación”, ya que es una variable más de la economía. Eso lo disocia del dólar oficial, ya que sigue de atrás a los precios. “Eso reduce la competitividad cambiaria”, dice Bisang y amplía las brechas entre los tipos de cambio.
La brecha y el salto del CCL
Esa dispersión entre el precio del oficial y los paralelos se ve muy marcada en el último tiempo, y que, de estar en el 29,5% el día posterior a la devaluación del 54% que implementó el ministro de Economía, Luis Caputo, el 23 de diciembre del año pasado (y en el medio llegó a tocar el 17,8%, el 20 de diciembre), pasó a ubicarse arriba del 50% este martes.
Otro elemento clave que menciona Reschini es la dinámica de los dólares financieros, sobre todo, del Contado Con Liquidación (CCL), que históricamente se arbitra con el blue. Advierte que, en el último tiempo, lo ve en valores un poco altos al dólar cable. Y, aunque menciona que “hoy bajó por primera vez luego de varias ruedas”, indica que no es ajena esa tendencia alcista a la caída de demanda de pesos con alta inflación y tasas negativas mencionada. Esos elementos se combinan con la incertidumbre acerca del desenlace del tratamiento de la ley en el Congreso.
Lo que viene: ¿hay techo para el dólar blue?
Todo ese contexto, sin dudas, incide en la dinámica alcista del dólar blue, pero la gran incógnita de siempre en esta plaza es a qué precio puede llegar.
“Como siempre, es un misterio, pero un elemento a destacar es que todavía se encuentra por debajo del dólar tarjeta, que cotiza en $1.389”, apunta Bisang en un intento por buscar un posible techo. Pero insiste en que es una tarea muy difícil anticipar hasta dónde puede llegar.
Y Glustein confirma esa postura al señalar que “no tiene es techo porque es muy dinámico el mercado”. Arriesga que los $1.300, que en los últimos días llegó a superar el dólar Contado Con Liquidación (CCL) podría ser un tope, pero reconoce que “es bajo, al menos, en el escenario de hoy”, si prima la expectativa de un ajuste más desordenado y no hay éxito en las negociaciones por la ley ómnibus.
Así, es una ruleta rusa arriesgar el precio del dólar blue y su techo para el mediano plazo. Ya pasó al MEP y, aunque aún la diferencia es pequeña ($1.233 del MEP contra $1.255 del blue), si se amplía, puede volver el rulo, hay algunos indicios en que podría estar entre los $1.300 y los $1.400, basados en que el CCL y el tarjeta puede hacerle de tope en las próximas
Fuente: Ámbito Financiero
