Así lo reveló el presidente del Centro Azucarero Regional de Tucumán (CART), Julio Colombres, en el marco del taller interactivo “Biocombustibles: energía renovable en el NOA”, que se llevó a cabo ayer en los salones del Jockey Club, organizado por la Fundación del Tucumán.
“En principio se demoraría la puesta en marcha del plan, porque las petroleras y las automotrices están diciendo que el plan tiene que entrar en vigencia completo y no parcialmente, con lo cual es muy probable que el plan empiece en 2011”, recalcó. Colombres destacó que, según esta visión, “o se tienen los 270 millones de litros de alcohol anhidro todos juntos o no se los tiene; si no se los tiene no puede entrar en vigencia el plan”.
Según el titular del CART, el argumento de los sectores que proponen que se postergue la producción de biocombustibles apunta a que un automóvil que consume la mezcla de alcohol con nafta en una provincia no puede entrar a otra a cargar nafta pura, porque eso podría dañar el vehículo, y las responsabilidades recaerían sobre las petroleras y las automotrices. “Si se postergara el inicio del programa, van a ganar las automotrices y las petroleras, en detrimento de los tiempos de los azucareros”, estimó.
En esta línea, el coordinador del Programa Nacional de Biocombustibles, Osvaldo Bakovich -presente en el taller-, admitió que de acuerdo con los proyectos que se presentaron en la Secretaría de Energía, no se llegará al 1 de enero del año próximo a disponer del 5% de bioetanol en las naftas para toda la demanda. Sin embargo, agregó que están estudiando cómo trabajar entre enero y junio para a partir de ese mes llegar a la meta. “Vamos a llamar en breve a los alcoholeros para ver cómo hacemos”, explicó. Al respecto, descartó las hipótesis sobre el supuesto lobby de las petroleras para postergar un año la implementación general del programa. “No se habla de postergar, porque no tiene sentido llevar el plan a 2011 cuando en julio de 2010 podemos comenzar a implementarlo”, aseveró Bacovich.
“A lo mejor se podría ir más rápido si hubiera políticas más claras. No hay un mal precio fijado para el combustible, pero de una tonelada de caña se sacan 100 kilos de azúcar y no más de 60 u 80 litros de alcohol. El alcohol debe contar con un precio más alto que el azúcar para ser interesante”, afirmó Ricardo Fernández Ullivarri, director de la Estación Experimental Chacra Santa Rosa (Salta). Este organismo es sostenido por los ingenios Ledesma (Jujuy), Río Grande y Tabacal (Salta).
Disertantes y debates
“Consideramos que el plan de biocombustibles debe estar bajo un paraguas de un plan de desarrollo de mitigación de cambio climático, para lo cual hay que trabajar de manera estratégica”, dijo el secretario de Energía de Salta, Marcelo Palópolis.
El ex ministro de la Producción, Franco Fogliata, autor del libro “Biocombustibles: una mirada hacia 2010; su impacto en el país y el NOA”, sostuvo que los proyectos de biodiesel en la Argentina “van muchísimo más rápido con las plantas establecidas y porque todo se exporta. Dejó en claro que con el bioetanol “todavía estamos un poco quedados en el tema, un poco por una cuestión económica y otro por falta de planes”.
El industrial Jorge Rocchia Ferro opinó que antes de hablar de deshidratación de alcohol, en Tucumán habría que enfatizar en la ampliación de la capacidad de destilación de alcoholes en los ingenios.
Se potenciará el desarrollo del NOA
El ejecutivo del ingenio Ledesma, Federico Nicholson, opinó que el plan de biocombustibles podría permitir que el NOA se equilibre con el resto de las regiones del país. “La Argentina necesita políticas diferenciadas para resolver o mitigar el problema que tiene de desequilibrio regional, porque hay algunas que crecen más que otras”, indicó Nicholson. Sostuvo que el NOA sigue postergado pese a los muestran los índices y a que las cosas se hagan mejor. “Es necesario tener políticas de Estado para promover una mejor integración, y esta política del plan alconafta es una muy correcta, porque contribuye al mismo tiempo a tener energía más limpia y a potenciar el desarrollo del NOA”, aseveró. Dijo que los proyectos para elaborar biocombustibles están todos presentados en la Secretaría de Energía. “Esperamos que se aprueben para iniciar las obras”, remarcó.
“La región, en un lugar de privilegio”
“La producción de 14 millones de toneladas de caña de azúcar y de casi 900.000 toneladas de soja, sumada a las producciones de las demás provincias del NOA, colocan a la región en un lugar de privilegio para encabezar la elaboración nacional de bioetanol, y sumarse a la de biodiesel”, dijo el presidente de la Fundación del Tucumán, José Manuel García González, durante su discurso de apertura de las jornadas. “Errores en las políticas públicas han desalentado las inversiones energéticas en el país, llevándonos a importar fueloil de mala calidad de Venezuela, energía eléctrica de Brasil, y gas de Bolivia, cuando éramos un importante exportador de gas a Chile”, sostuvo el directivo, y agregó que sólo el intercambio y el entendimiento entre sector público y privado evitarán repetir errores. García González felicitó a Franco Fogliata por su libro.
“Abrir la cabeza es lo más importante”
“Ahora no debemos fijarnos en el potencial de los biocombustibles, sino ver cuál es la actitud con la cual enfrentamos el tema de la energía. Lo que sabemos ciertamente es que no queremos ser monodependientes de un único tipo de energía”. El concepto pertenece a Enrique Morad, director de asuntos corporativos de Loma Negra Ciasa. El directivo dijo que la utilidad de determinado tipo de energía en cada establecimiento es diferente. “Esto tiene que ver con los costos de instalación, con las distancias, con las pérdidas técnicas… Lo más importante es abrir la cabeza:?la energía en el mundo moderno tiene múltiples orígenes, y debemos estar dispuestos a ganar y a tomar la energía de todo origen. Esto tiene que ver con el precio, con la abundancia, con la época del año”, afirmó Morad, cuya disertación de anoche se denominó “Cambiar el futuro”.