El oro alcanzó un máximo de más de una semana, mientras el dólar caía tras los débiles datos económicos publicados en Estados Unidos y las expectativas de que la Reserva Federal no suba las tasas de interés en junio.
“La Reserva Federal no querría hacer todo este esfuerzo y luego volver a bajar las tasas desde donde están. Creo que quieren mantenerlas elevadas”, dijo Daniel Pavilonis, de RJO Futures.
El jefe de la Fed de Filadelfia, Patrick Harker, dijo que, salvo sorpresa en los datos económicos, prefería mantener los tipos estables en junio. Otras autoridades monetarias también apuntaron a una pausa en las alzas de tasas. Los mercados ven ahora un 75% de probabilidades de que no haya cambios en junio.
El oro, que no devenga intereses, tiende a perder atractivo cuando suben las tasas.
En otros metales preciosos, la plata al contado mejoró un 1,7%, hasta un máximo de dos semanas de u$s23,88 la onza; el paladio ganó un 2%, a u$s1.389,78; y el platino avanzó un 1,2%, a u$s1.004,93, después de tocar un mínimo de siete semanas.
Perspectiva a futuro para el oro
En el plano macroeconómico, las ofertas de empleo en Estados Unidos aumentaron inesperadamente en abril y los datos del mes anterior se revisaron al alza, lo que apunta a una persistente fortaleza del mercado laboral que podría obligar a la Fed a subir de nuevo los tipos de interés en junio.
Sin embargo, los funcionarios de la Reserva Federal, incluido el vicepresidente designado, apuntaron a una “pausa” en la subida de tasas en junio, lo que provocó un rápido cambio en las expectativas del mercado de otra subida, mientras el banco central estadounidense aplica la cautela frente a unos datos de inflación aún sólidos.
El índice del dólar, que compara al billete verde tras una cesta de seis destacadas monedas, sube un 0,13%, a 104,28 unidades desde su nivel más alto en más de dos meses, lo que abarató los lingotes para los compradores extranjeros.
Las tasas de interés más altas restan atractivo a los lingotes de rendimiento cero.