Consultas por Zoom y reuniones por Whatsapp, son hoy las herramientas que llevan adelante abogados salteños que buscan ejercer su profesión y asistir a sus clientes en medio de la pandemia del coronavirus. La tecnología se ha convertido en su principal aliado, sin embargo existe una fina línea entre el acceso a la justicia y la violación de normas constitucionales.
Pedro Brugos, presidente del Colegio de Abogados contó a Dossier Web el proceso de transformación en el que se encuentran.
Si bien existe una iniciativa de la Justicia salteña en adquirir herramientas tecnológicas como el lanzamiento del expediente digital, uno de los grandes desafíos, es el poder impartir justicia en medio de una pandemia global.
Burgos asegura que han atravesado muchos obstáculos para poder desarrollar su trabajo, el cual se ha visto incrementado por reclamos laborales, de familia y de carácter civil y comercial, debido que la paralización de la actividad les impidió continuar con causas que necesitan soluciones urgentes.
Asegura que existen serias dificultades en el acceso no sólo en los profesionales que trabajan en la capital salteña, sino en el interior provincial, donde las herramientas tecnológicas escasean y la conectividad es mucho más inestable.
Esta combinación de factores ha dificultado el acceso a la Justicia generando grandes demoras en la realización de trámites, lo que ha sacado a luz la necesidad de realizar cambios estructurales. “Existe una demora importante en la respuesta judicial”. A eso se suman los problemas para poder mantener reuniones con quienes necesitan la asistencia jurídica, debido a que los conflictos sociales no se han detenido, por el contrario según el propio Burgos han ido en aumento. Hoy se ven obligados a asistir y asesorar a través de medios tecnológicos, algo antes impensado, llamadas de celular, Whatsapp, mail y hasta Zoom, reuniones virtuales donde no sólo deben atender una situación de emergencia, sino de contención y planificación de estrategias; sin dudas la tecnología se ha convertido en su gran aliado, sin embargo existen riesgos.
Burgos explica que hay situaciones que deben ser especialmente atendidas debido a que el uso de las herramientas de comunicación digital en audiencias puede incurrir en violaciones a normas constitucionales, por lo que considera importante la legislación de su uso con pautas claras.
Si bien el Poder Judicial implementó algunas herramientas tecnológicas como la carga digital de escritos, los abogados consideran que no es suficiente, porque aún se ven obligados a caminar por tribunales en búsqueda de un expediente o un pedido de respuesta.
“Deben cambiar las formas de comunicar las resoluciones, de decretar, proveer, resolver, de manera tal que en estos tiempos , ante la falta de digitalización de expedientes, podamos conocer claramente a qué se refieren cuando decretan, proveen o resuelven, informando además quienes suscriben eso actos jurídicos judiciales, incorporando el texto , la foto escaneada. Los funcionarios claramente deben adecuarse a la tecnología y brindar mejores herramientas”, asegura.
Esta situación asegura, que ha impactado directamente en la sociedad, donde personas que tienen problemas graves y necesitan ayuda urgente deben esperar con mayor incertidumbre una respuesta.
“Nuestra vocación profesional desde hace tiempo ha mutado, no somos sólo unos consejeros técnicos, sino que nos hemos convertido en contenedores sociales, que intentan evitar la pérdida de confiabilidad en la justicia”.
Siendo conscientes en que la tecnología es el nuevo camino, trabajan en la expansión de la firma digital para los matriculados, no sólo en el ámbito judicial sino en el todas las intervenciones del abogado, ya que esta firma digital permite suscribir un escrito judicial, como también contratos y acuerdos, otorga validez a la firma por esos medios.
“Nuestro Colegio desde hace tiempo implementó este servicio gratuito para matriculados, siendo uno de los primeros colegios del país que es autoridad certificante de firma digital, a la fecha 1300 abogados ya cuentan con firma digital, lo que se concretó en un mes y medio, de los cuales el 80% de los colegas del interior ya la tienen, y debemos seguir avanzando para todos los matriculados cuenten con ella”
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