Días pasados el gobierno anunció que Salta tendrá su primera planta productiva de litio, de la mano de la empresa Eramine Sudamericana S.A, subsidiaria del grupo francés Eramet. Dossier Web dialogó con Daniel Chávez CEO de la compañía para conocer los pormenores de la inversión y trabajo que realizarán en la puna salteña.
“Salta económicamente tiene dos ejes estratégicos la minería y lo agroindustrial, esto implica que la provincia tiene, afortunadamente, recursos minerales disponibles y de buena calidad”, advirtió.
En ese mismo sentido destacó que la provincia es amigable para las inversiones extranjeras y es por esto que desembarcaron en 2010 con las primeras tareas de exploración. “Lo que estamos viendo en este momento tiene que ver con un trabajo que lleva un largo período de tiempo”.
Todo proyecto minero necesita, previo a la construcción de la planta, una serie de estudios que implica inversiones considerables y “bastante tiempo para arribar a una factibilidad y la posterior construcción de un proyecto, que es lo que nosotros hemos hecho”.

Con resultados positivos en el Salar Centenario Ratones, ubicado en la puna salteña, al sur de la comunidad Santa Rosa de los Pastos Grandes, la empresa inició la construcción de su planta en 2019 con una inversión primaria de 100 millones de dólares.
“Después por problemas que tuvimos dentro del grupo y que fue consecuencia de una situación internacional, donde cayeron los precios de los principales productos que el grupo comercializa como el manganeso y el níquel, nos vimos obligados a parar en forma temporaria con las obras”.
Sin resultados favorables en abril del 2020 “suspendimos totalmente la construcción y ahora estamos retomando, el año pasado invertimos otros 100 millones de dólares. Ahora estamos anunciando el remanente para terminar de construir la planta”. Obra que demandará al menos otros 400 millones.
Daniel explica que el litio genera toda una cadena de valor. “El primer elemento lo constituyen las empresas que producen productos primarios de litio, lo que más se está comercializando para el sector energético es el hidróxido de litio y el carbonato de litio, estos son productos que requieren de mucha tecnología para tener la calidad que exige el resto de la cadena de valor”.

“Le siguen los productores de electrolitos y los de baterías secundarias que constituyen una parte muy importante para la industria automotriz, que están en los últimos eslabones de la cadena de valor, hoy con mucho interés por la regulación de tener que pasar de motores de combustión interna a motores eléctricos”.
Es mucho el trabajo que tienen por delante y en ese contexto destaca que Salta es una provincia muy amigable para las inversiones extranjeras y para la minería, “nuestra proyección es ir por la fase uno, que consiste en 24.000 toneladas de carbonato de litio, grado batería, pero tenemos pensado a nueve años completar otras tres fases”.
Si todo sale tan cual lo han planeado y proyectado, la planta debería estar terminada a finales del 2023 y operativa a principios de 2024.
“Estamos trabajando en Salta hace once años, con una inversión muy considerable, los procesos dependen del mineral a explotar y se deben hacer muchos estudios de factibilidad y recién comenzar a hablar de la construcción de una plata, son procesos largos y se necesita un respaldo financiero”, recordó Daniel.

Es por esto que insistió en que la minería necesita de seguridad jurídica, “que no se cambien las reglas del juego permanentemente, la Ley de Inversiones Mineras es una de las más importantes para nosotros, donde se habla de estabilidad fiscal, algo fundamental por cuestiones impositivas, teniendo en cuenta que las inversiones son muy altas”.
Sobre los capitales de la empresa contó que el grupo Eramet es francés, y ahora tiene un socio chino. “Se trata de un grupo minero metalúrgico que ha globalizado sus operaciones, sus principales productos son el manganeso, también de níquel, titanio y circonio. El litio tiene una importancia dentro de este porfolio muy relevante porque viene a complementar lo que ya produce la compañía”.
Se trata de una empresa que cotiza en la bolsa de París, y factura anualmente alrededor de cuatro mil millones de dólares, el gobierno francés tiene una participación importante, según explicó.
“Del lado de la sociedad china, facturan anualmente unos cuarenta y cuatro mil millones de dólares al año y es el primer productor de acero inoxidable del mundo y se asociaron para llevar adelante este interesante proyecto que esperamos tenga el éxito que deseamos”.