La neumonía es una enfermedad infecciosa del sistema respiratorio causada por microorganismos, que suele producirse en consecuencia de otras afecciones como gripe y resfrío. Puede ocurrir en cualquier edad pero los bebés y los niños hasta los 2 años tienen mayor predisposición a las infecciones, debido a que el sistema inmunitario todavía se encuentra en desarrollo. También se deben extremar cuidados con personas mayores de 60 años que formen parte de un grupo de riesgo, o personas con enfermedades crónicas.
Las medidas de prevención que se deben tomar, más aun teniendo en cuenta el contexto actual son conocidas pero es importante recordarlas:
- Mantener distancia de dos metros con otras personas.
- Mantener las manos limpias, con lavado frecuente o uso de alcohol en gel siempre que se encuentre en ambientes públicos o autobuses, antes y después de manipular basura o desperdicios, antes y después de comer o amamantar o después de ir al baño
- Usa barbijo casero que te cubra nariz, boca y mentón. Al toser usar el pliegue del codo o pañuelos descartables que deben ser desechados a la basura.
- Desinfectar bien los objetos que se usan con frecuencia. No compartir utensilios de uso personal.
- En caso de presentar síntomas, aunque sean leves, consulta inmediatamente al sistema de salud seguir las recomendaciones del personal sanitario. No automedicarse.
- Evitar fumar, esto causa inflamación en los tejidos de las vías aéreas, que facilitan la proliferación de microorganismos, además de la disminución de la capacidad del pulmón en promover la expulsión del microorganismo.
- Evitar lugares cerrados y con mucha gente, sobre todo en período invernal o de bajas temperaturas. Ventilar los ambientes para que se produzca recambio y circulación de aire.
- Vacunarse anualmente contra la gripe las vacunas son fabricadas con el objetivo de proteger contra los virus más peligrosos que circulan en el ambiente a lo largo del año, siendo muy importante para niños hasta los 5 años, ancianos y portadores de enfermedades crónicas, como diabetes, cardiopatías y enfermedades pulmonares.
- Es importante tener una alimentación equilibrada saludable. Los principales consejos son: limitar la ingesta de alimentos elevados en calorías; distribuir los alimentos en 4 comidas y 2 colaciones; moderar el tamaño de las porciones; consumir frutas, verduras y legumbres; disminuir el consumo de azúcar y alcohol; y, por último, incorporar 30 minutos de actividad física al día.
- Además, el sueño es una de las necesidades básicas de las personas que es necesario mantener. En especial en la infancia, el sueño se encuentra en desarrollo y es imprescindible para un adecuado crecimiento físico y desarrollo neurológico y emocional del niño. De ahí la importancia de dormir las horas necesarias y que este sueño sea efectivo y proporcione un descanso reparador.
Ante la presencia de signos y síntomas compatibles con neumonía como fiebre alta, tos con flema ,dificultad para respirar , es importante tener una evaluación médica para un diagnóstico rápido y el inicio del tratamiento lo antes posible.
Por: Cecilia Avancini
Fuente: La Nación