El panorama local de las conexiones a Internet registra un avance de la fibra óptica, que ya cuenta con 1.047.817 accesos de este tipo a marzo de 2020, de acuerdo al reporte CABASE Internet Index elaborado por la Cámara Argentina de Internet. Según el informe, estas conexiones crecieron un 64,4% respecto de marzo de 2019 y ya forman parte del 11,9% del total de conexiones fijas de banda ancha de la Argentina.
Por su parte, las conexiones de banda ancha por cablemódem se mantienen como la tecnología más utilizada para acceder a Internet, presente en el 55,6 por ciento de las conexiones. Le siguen los accesos ADSL con un 26,1 por ciento, una modalidad que está en retroceso, con una caída de 10 puntos comparado con los registros de marzo de 2019.
Respecto a la evolución de los rangos de velocidades de conexión a nivel nacional, el reporte de CABASE destaca un gran crecimiento de la velocidad promedio, que pasó de 17 Mbps en marzo de 2019 a 38 Mbps en marzo de este año.
Internet durante la cuarentena en la Argentina
Desde el 20 de marzo, en la Argentina se registró un importante crecimiento del tráfico debido al aislamiento social, preventivo y obligatorio por la pandemia de coronavirus. Según el reporte de CABASE, durante marzo y abril llegó al 35 por ciento en comparación al tráfico promedio de febrero. Para finales de abril se registró un tráfico de 780 Gbps, un crecimiento del 65 por ciento respecto al mes de abril de 2019.
Este salto en el crecimiento fue el resultado de una adopción masiva del teletrabajo, las clases virtuales y el crecimiento exponencial del consumo de películas, series, juegos y otros contenidos de entretenimiento con calidad de video que demandan gran ancho de banda, que pusieron a prueba la infraestructura de red en la Argentina, dijo la Cámara Argentina de Internet.
“La infraestructura de red estuvo a la altura, hubo un cambio de tráfico de empresas a los hogares. Se experimentaron problemas en la conexión domiciliaria, muchas casas no estaban preparadas para el trabajo remoto, en este contexto el eslabón más débil fue el wi-fi hogareño. Se incentivó un uso responsable y la gente tomó nota”, le dijo Ariel Grazier, presidente de la Cámara Argentina de Internet (CABASE).
“En los primeros quince días de la cuarentena tuvimos un cambio enorme en todo el ecosistema. Fue una transformación que en otro contexto hubiera demandado un trabajo de diez años. El día que salgamos de la cuarentena tendremos incorporadas estas nuevas formas de uso, más conectados y con más trabajo remoto”, concluyó Grazier.
Fuente: La Nación