El ministro de Economía estampó su firma en tres resoluciones destinadas a hacer efectiva la decisión de la Presidenta de derogar la resolución 125 y reestablecer el esquema de retenciones que estuvo vigente hasta el 10 de marzo pasado para las exportaciones de soja, girasol, maíz y trigo. Sin embargo, el agro tiene sus dudas.
Las resoluciones, que llevan los números 180, 181 y 182 tienen como eje el decreto firmado hoy por la Presidenta en la que se instruyó al ministro de Economía a limitar la vigencia de la norma que puso en marcha el esquema de retenciones móviles -dispuesta durante la gestión del ex ministro Martín Lousteau- y la reposición de las posiciones arancelarias dispuesta el 7 de noviembre pasado.
Con la derogación de la resolución 125, las retenciones para la soja vuelven a una alícuota fija del 35 por ciento; para el girasol al 32 por ciento; para el maíz al 25 por ciento y para el trigo al 28 por ciento.
La resolución 180 "limita" el régimen de "compensaciones para pequeños productores de soja o girasol" y para el "transporte de granos producido en provincias extrapampeanas", entre otros puntos.
La 181 repone artículos de la resolución 184 de septiembre de 2007 relacionados a alícuotas de derivados de la soja, mientras que el 182 pone nuevamente en vigencia el esquema de retenciones fijas vigente a partir del 7 de noviembre del año pasado.
Mario Llambías, titular de Confederaciones Rurales Argentinas, dejó en claro que el decreto 1176 anunciado por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, no termina de convencer a las entidades del campo. El dirigente rural estuvo reunido con abogados y analizó la normativa del Gobierno que llama a “limitar” la polémica resolución 125 sobre retenciones móviles.
