Fabián Koehle es la cara de Catalina’s, un emprendimiento gastronómico que desde hace 18 años se especializa en la elaboración de panes, pastas y pizzas con masa madre. La difusión y expansión de sus productos le permitió a la marca ampliar su propuesta y desde hace poco más de un año la clientela puede mixturar el consumo de panes y comidas artesanales con café de especialidad. “Catalina’s expresa mi forma de comunicarme a través de la gastronomía y mi forma de entender la gastronomía a través de lo artesanal”, manifestó.
Catalina’s es también un proyecto familiar que surgió a partir del interés de uno de los hijos de Fabían de estudiar gastronomía y después de desvincularse de otro rubro comercial, Koehle entendió que era momento de avanzar en esta propuesta que lleva un nombre “de peso” en su núcleo íntimo porque su abuela y su hija se llaman así. “Yo quiero que la gente coma cómo lo hace en su casa y como yo me alimento en mi casa, usando los mismos ingredientes y demás. Esa receta no falla”, sostiene el cocinero que hoy emplea a 14 personas en su proyecto.
-. ¿Qué es Catalina’s?
Es un lugar donde todo es artesanal, donde la elaboración de lo que hacemos demora más de lo normal, pero con una alta calidad y donde cuidamos todo el proceso de lo que hacemos.
-. ¿Cómo llega la masa madre a tu vida?
Surgió casi de casualidad. Cuando como pan me gusta comer un buen pan y la carencia de buenos panes en el mercado junto a la aparición de redes sociales me llevó a conocer alternativas. Soy cabeza dura y de tanto insistir encontré una masa madre que me funcionó y luego fui incorporando semillas y otras harinas porque además de hacer panes ricos buscamos darles un valor nutritivo.
-. ¿Cuál es la respuesta de los clientes?
En un principio la gente escuchaba hablar de masa madre y desconocía, no sabía lo que era. Después, en la pandemia se puso de moda porque la gente empezó a hacer pan. En nuestro caso tenemos poca producción en poco tiempo, entonces al tener masa madre con larga fermentación el producto se encarece, pero cuando la gente empezó a probarlo y a ver que era otra cosa, que no se compara a otro pan, la recepción fue buena. Y cada vez nos demandan otros tipos de panes. Nos nutrimos de la gente y la demanda es buena.
-. ¿Soñaste con este crecimiento que experimentaron?
Soñé y trabajé mucho para conseguirlo. Estudio mucho, sé donde quiero llegar y me esfuerzo por cumplir los pasos necesarios para eso. Pasé por mucho aprendizaje y el resultado que hoy tenemos se sostiene por la calidad percibida del cliente. Las croissant, los panes, las pastas son frutos de recetas con las que fracasé, pero insistí hasta que salieron y una vez que salieron bien tuve que hacer más cantidad. Esto se sostiene por la calidad percibida en el cliente porque de nada sirve que yo crea que mi producto es bueno y también es fundamental el equipo de trabajo que hoy tengo porque uno se proyecta con un equipo detrás.
-. ¿Cuántas personas trabajan hoy en el negocio?
Entre la panadería y el salón hoy somos 14 personas. Este es un rubro de rotación y sin embargo hay personas que llevan trabajando conmigo más de cuatro años y eso no es usual. También hay chicos que trabajaron conmigo y hoy venden productos similares por redes y me pone bien que les vaya bien y que yo haya tenido un poquito que ver con eso. No me molesta para nada, son las reglas del juego, ellos me ayudan a crecer a mí y yo los ayudo a crecer.
-.¿Cómo fue el paso de ofrecerle algo distinto a la clientela?
Paspartú es un multiespacio, donde además de Catalina’s, el cliente encuentra un taller de cerámica y una agencia de viaje. Y en este multiespacio tenemos la misma idea de negocio donde lo artesanal toma una característica diferencial. Yo necesitaba un lugar con mesas porque quería que la clientela disfrutara los productos en el momento y en el lugar, y para eso necesitaba servir las cosas como a mí me gusta. Ahí también aparece el café en mi vida y terminé complementando el producto que ya teníamos.
-. ¿Cómo te proyectas a futuro?
La gastronomía me hace conocer cosas nuevas y como soy una persona abierta, pienso en la posibilidad de abrir más locales repitiendo conceptos porque hoy la confitería nos quedó chica, así que seguramente habrá nuevos locales relacionados a Catalina’s.
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