La pandemia golpeó fuerte a toda la actividad económica y las pymes, uno de los grandes motores de ese sector, Carlos Tamer, secretario general de la Cámara Pyme de Salta asegura que hoy viven una pesadilla que nunca imaginaron, sin embargo apuestan a la capacidad de adaptación y ayuda del estado para poder sobrevivir a esta temporada.
Es el creador y gerente de Radima, una empresa que se dedica a la automatización industrial en Salta hace ya 12 años, con su experiencia asegura que la tecnología y la robótica son el nuevo sendero del mercado. En diálogo con Dossier Web contó cómo trabajan y cuál es la realidad del sector empresarial salteño.
En la provincia existen pymes con 5 empleados, 50 y 500, todos afrontan graves problemas a raíz de la pandemia del coronavirus, en la mayoría de los casos los empresarios va salvando obstáculos, “intentan el financiamiento por todos los medios y por eso son tan potentes”, asegura Carlos.
Si bien destaca las ayudas que puso a disposición el gobierno nacional, se mostró muy entusiasmado con los anuncios del gobierno provincial porque sostiene que serán imprescindibles para poder dar aire a las empresas en este difícil contexto.
“El Pyme se retroalimenta de la pasión de lo que hace, nace y aprende en algunos casos de lo que hicieron sus familiares, su motor es la pasión”.
Asegura que hoy las Pymes salteñas están viviendo una pesadilla que nunca imaginaron en ninguno de los hipotéticos casos que plantearon cuando se comenzó a escuchar la palabra pandemia. Esta situación los llevó a ver la “elasticidad y tolerancia que tienen las empresas a la subsistencia, han hecho muchas cosas para sobrevivir”.
Sin embargo les preocupa que el instinto de supervivencia se convierta en el método con el cual permanezcan en el mercado. Creen que muchas empresas ya se sienten anestesiadas a vivir de este modo y ruegan que las cosas cambien ya que ese sentir atentará contra su crecimiento y la generación de empleo que tiene un gran impacto social.
Destacó las gestiones que se hicieron desde la Cámara Pyme de Salta porque al ver una realidad tan difícil se pusieron a trabajar en pos de generar alternativas, aunque hoy miran con mucha peligrosidad la pérdida de empleo que ya se siente y que podría profundizarse en los próximos meses.
Radima una empresa dedicada a la automatización industrial
Carlos conoce bien cuál es la realidad que hoy vive un empresario, es el creador de Radima, donde hace 12 años se dedican al mantenimiento industrial, pero con el correr del tiempo aumentaron y modificaron sus servicios, es por esto que asegura un empresario siempre se readapta a las condiciones del mercado.
“Hoy nos dedicamos pura y exclusivamente a la automatización industrial, al IoT, es el denominado internet de la cosas, a la domótica y a la robótica, a pesar de ser una empresa de capitales salteños, nos destacamos porque nos dedicamos a la tecnología de punta con una pasión enorme”, explica en comunicación con Dossier Web.
Buscando generar un valioso aporte a la comunidad, cuenta que desarrollaron un respirador que hoy están rediseñando y el cual se encuentra a disposición para la población de forma gratuita.
A raíz de las medidas dispuestas por el Comité Operativo de Emergencia hoy trabajan con un régimen de horario reducidos, preservando la salud y la vida por sobre todas las cosas. “Estamos atendiendo tres veces por semana, medio turno y con grupos rotativos”.
Carlos asegura que el cambio es constante, y que siempre se re oxigena tanto la oferta como la demanda de cualquier servicio, “recordemos que el 80% del PBI mundial reside en los servicios, este cambio es constante y probablemente siga así, uno de los mayores valores agregados que se puede tener a nivel empresa es la adaptabilidad”, asegura explicando que los puestos laborales de hace cinco años atrás no son los mismos que ahora, por lo que la oferta educativa debe ser adaptada los requerimientos actuales.
Las empresas ahora no sólo necesitan readaptarse sino también velocidad en la tasa de cambio, servicios como los que propone Radima una empresa exclusivamente tecnológica, tenemos tendencia hacia la automatización industrial, una máquina o un brazo robot pueden soldar con muchísima más precisión que una mano humana, en mayores tiempos y con mayor calidad, con lo cual aclaro no es que se destruyen los puestos laborales, sino que se modifican, porque a esas máquinas, automáticas o semiautomáticas, alguien las tiene que mantener y manejar, asegura.
DossierWeb