Gustavo Oliverio, Presidente de la Fundación Producir Conservando, opinó que “es muy difícil hacer una estimación real de lo que va a ser la producción" – "Creo que vamos a estar por debajo de los 40 millones de toneladas y más cerca de los 35 millones".
“Si sigue lloviendo bien, en lo que resta de febrero y los primeros días de marzo, podremos mejorar en dos o tres millones de toneladas el número estimado para la producción total de soja. Eso nos llevaría a números que no constituyan un desastre porque una cosecha de 35 millones, sería muy impactante en , por ejemplo, los ingresos por exportaciones”, remarcó Gustavo Oliverio, Presidente de la Fundación Producir Conservando.
En diálogo con Siempre que llovió …, paró dijo que su “impresión es que la cosecha de soja va a ser la más baja de los últimos tiempos y el tema es saber si habrá dos o tres millones de toneladas más si el clima se arreglara. La caída de producción argentina va a ser realmente significativa”.
El especialista explicó que “es muy difícil hacer una estimación real de lo que va a ser la producción. En lo personal creo que la situación actual es inédita, la magnitud de la seca en área es muy severa por las altas temperaturas; es muy difícil tener una estimación concreta. El primer indicio lo dio la Secretaria de Agricultura americana, que siempre es muy prudente en lo que hace a sus número: bajó en seis millones de toneladas la estimación de un mes a otro, habla de 42 / 43 millones de toneladas”.
Para Oliverio, “vamos a estar por debajo de los 40 millones de toneladas y más cerca de los 35 que de los 40 millones. Y en maíz también creo que los 14 millones de toneladas estimados no están. Si uno mira lo que ha pasado, lo que se ha perdido y la cantidad de maíces que se han picado para forraje, si tuviéramos 12 millones de toneladas sería un éxito total”.
También señaló que “la seca de final de invierno pegó muy fuerte en el cultivo trigo, afectó la siembra de soja de primera, que en la zona núcleo arranca los primeros días de octubre. Es muy difícil saber la proporción de lo sembrado en octubre, si en la zona núcleo hubiéramos tenido sembrado todo en los primeros días de noviembre, hoy estaríamos más comprometidos porque el período crítico de la soja se hubiera dado en plena sequía. El efecto de la seca va a ser muy importante, en todas las zonas va a haber represión de rendimiento, en muy pocos lugares el potencial del cultivo va a llegar a niveles normales”.
“Si viniera un periodo seco en el otoño va a afectar mucho al trigo porque la recarga de los suelos de otoño es clave para poder implantar los trigos en fecha y con buen potencial de rendimiento. Si tenemos un otoño seco vamos a tener comprometida la campaña de trigo”, concluyó.
