Ante la grave sequía que sufren los productores agropecuarios en distintos puntos del país, el Gobierno nacional busca aceitar el mecanismo de asistencia para el sector ganadero, para contrarrestar las pérdidas millonarias que ocasionará la situación, en una nueva señal hacia el campo, que reclama una acción concreta al respecto. La idea oficial es favorecer a los productores de las provincias más afectadas, como Buenos Aires, Chaco, Santa Fe, Entre Ríos y Santiago del Estero, a través de la provisión de forraje de maíz para alimentar a los animales.
El plan está a cargo de la Secretaría de Agricultura, que comanda Carlos Cheppi, pero sería implementado a través de las autoridades provinciales y los municipios, en momentos en que se augura "el otoño más seco del siglo".
"El Gobierno asume el compromiso de colaborar con todos los productores agropecuarios afectados por la sequía, en defensa de la producción", afirmó esta semana el ministro del Interior, Florencio Randazzo, con la intención de contener la preocupación de los productores y de los gobernadores provinciales.
Por el momento, además de la provisión de alimento para el ganado, el Ministerio de Producción, a cargo de Débora Giorgi, ya encaró el seguimiento de las resoluciones de emergencia agropecuaria dictadas en distintas provincias, a fin de determinar si existen nuevos pedidos de productores y autoridades.
Las pérdidas por la sequía se sentirán tanto en el sector agropecuario como en los ingresos del Estado, ya que las arcas nacionales percibirán unos 3 mil millones de pesos menos en retenciones, con relación a 2008.
A la vez, la producción total de granos rondaría los 80 millones de toneladas, o sea, 20 millones menos que en la cosecha anterior, según la agencia DyN.
Alta probabilidad de que continúe la sequía
Según explicó la licenciada Estela Carballo, experta en medio ambiente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), "se espera el otoño más seco de los últimos cien años".
Carballo detalló que la sequía se agravará a partir de los próximos meses, porque no habrá lluvias y los suelos ya se encuentran "sin carga" de agua.
En la misma línea, un informe coordinado en los Estados Unidos indica que la Argentina tiene probabildades de ingresar en un nuevo período de La Niña que se sumará al actual en otoño: tres campañas agrícolas sin interrupción afectadas por la sequía será la consecuencia
Así lo consigna el IRI, The International Research Institute for Climate and Society.
Por su parte, el ingeniero Eduardo Sierra, especialista en Agroclimatología, consideró que durante el final del verano y entrado marzo habrá "una pausa en La Niña" que ayudará al final de la soja pre-cosecha.
Sin embargo, el ingeniero agrónomo Javier Grimau sostuvo que una vez terminado el período de lluvias en febrero-marzo, se daría otro de "sequía prolongado en la segunda parte del otoño y del invierno".
20 M de toneladas menos
Según el análisis de la Fundación Producir Conservando, la Argentina tendrá en la campaña 2008-2009 unos 20 millones menos de toneladas de granos respecto del anterior ciclo cuando se cosecharon casi 98 millones.
Si bien algunos especialistas intentan mostrar las pérdidas en base a lo que no se recaudará o a las caídas en las estimaciones de cosecha (unos 3.600 millones de dólares, con precios promedio de 180 dólares la tonelada), la suma es mayor.
Eduardo Ciguetti, productor de Río Cuarto, Córdoba, aseguró a NA que necesita por lo menos 3 toneladas de maíz por hectárea para equilibrar "algo" los números y "sin embargo no sé si voy a conseguir 27 quintales".
En el norte de Buenos Aires comenzaron a surgir los dilemas sobre si picar el maíz que no prospera por falta de lluvias y que en muchas áreas no crece en tamaño con granos salteados en las espigas, y en otras, ha comenzado a secarse.
Las pérdidas serán mayores que la cosecha que dejará de levantarse: "Precisamos ayuda", dijo Mario Llambías (presidente de CRA), pero "nosotros sabemos muy bien lo que es ayuda y clientelismo político".
El Panorama Agrícola Semanal del Departamento de Estimaciones Agrícolas (PAS) que dirige el ingeniero agrónomo Eduardo Anchubidart sostuvo que todo el trigo obtenido (sembrado a medidados de 2008) fue 8.7 millones de toneladas.
"La disminución en producción sería de 6.500.000 de toneladas a comparación del año precedente, siendo hasta el presente la producción más baja de las últimas dos décadas, solo superada por la zafra 1988/89, con 8,54 millones de toneladas" sostiene el informe.
El área de maíz cayó a 2.38 millones de hectáreas, 60.000 menos que la semana anterior, dado "que por las condiciones climáticas, fechas de siembra y contexto que rodea al cereal, por lo que en muchos casos los productores han optado por no implantarlo, dice el PAS.
En la zona núcleo productiva más afectada ya se habla de pérdidas en rindes de maíz del 40 por ciento y de la desaparición del 20 por ciento de los productores-contratistas
El caso del girsol que ya comenzó a secarse habla de "un baja de la productividad respecto a la campaña pasada" con 2.07 millones de hectáreas cosechables y un rinde promedio de 9.7 quintales en algunas zonas.
Si bien se ha sembrado más de 16.3 millones de hectareas de soja, la evolución de este cultivo es un interrogante porque necesitar lluvia en el momento de la floración.
Fuente: IProfesional