Los números dejados por los festejos del Carnaval en la región auguraban un excelente escenario para los fines de semana largos posteriores, incluida la Semana Santa. Pero la irrupción del Covid-19 derrumbó como un castillo de naipes toda esa expectativa previa.
En Salta, Jujuy y Tucumán, desde las áreas de Turismo, analizan los pasos a seguir, aunque sus autoridades admiten que este nuevo panorama los deja sin muchas chances para aplicar un plan B.
El sector hotelero es uno de los más afectados ya que la paralización de la actividad se hace evidente, pero además de ello la resolución 131 del Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación es inapelable: se prohibió de manera tajante el alojamiento para turistas nacionales o extranjeros residentes en Argentina y se dispuso que todos las plazas estén disponibles para recibir a turistas extranjeros en tránsito hacia sus países de orígenes. La medida, obviamente, busca desalentar el movimiento interno de acuerdo a lo dispuesto por la cuarentena nacional y al mismo tiempo descomprimir la presión social sobre los extranjeros en tránsito por Argentina.
“No entran argentinos y ya quedan poco extranjeros, pero comprendemos la situación y entendemos la resolución del gobierno nacional” expresaron algunos empresarios del rubro al ser consultados por Dossier.
Por otro lado la Autoridad Metropolitana de Transporte en Salta, suspendió los servicios de turismo, con el objeto de fortalecer las medidas hasta ahora adoptadas. Esta orden regulatoria abarcó a todos los prestadores del servicio de transporte de pasajeros en la modalidad de turismo de la provincia. Idénticas medidas se adoptaron en Jujuy y Tucumán, por lo cual el movimiento de visitantes en la región es absolutamente nulo.
Los alcances de la cuarentena decretada con la prohibición a la gente para circular en las calles, ha tenido también un efecto inmediato en el rubro gastronómico donde hasta la semana pasada el 50 por ciento de los locales en Salta se había visto obligado a cerrar sus locales, mientras que el resto tomó la determinación de atender en un solo turno.
Las expectativas en ese sentido en las otras provincias de la región también eran de un cierre total a medida que se incrementen los controles y avance la cuarentena.
En Tucumán para Semana Santa
En 2019, esta fecha religiosa tuvo un impacto económico de $70 millones en la provincia de Tucumán. 25.000 turistas del país visitaron los diversos circuitos tucumanos y se registraron un total de 43.0000 pernoctes. Asimismo, alrededor de 2.000 turistas fueron atendidos en las dos oficinas de Información Turística que posee el organismo. Para este año, esperan incrementar un 30% esas cifras.
DATO
Durante el año 2018, según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), los viajes y el turismo representaron alrededor de 319 millones de empleos en todo el mundo.
Posponer; no cancelar
Es así que en términos de movimiento comercial y de acuerdo a los efectos mundiales, se puede asegurar sin temor al error que la primera víctima económica del Coronavirus, fue el turismo.
En Salta, como en otros lugares de alta concentración turística, se evalúan los pasos a seguir más allá de la cuarentena. Se analizan por ejemplo sistemas para reprogramar o dejar abiertos los planes turísticos con alguna promoción, para evitar que se caigan los paquetes. Esta parece ser la estrategia inmediata a la que se busca darle forma.
Para el caso y sabiendo la actividad que concentra la hotelería y el turismo, ha surgido en los países europeos un movimiento que propone posponer las reservas realizadas. Esta modalidad podría replicarse también en la región NOA.
Por ahora la idea es concentrar esfuerzos para frenar la avalancha de cancelaciones en los paquetes turísticos, lo que sería un golpe fatal para la liquidez de las empresas.
Los países receptivos del turismo son los que están viviendo la situación en primera fila de la situación. En Italia, por ejemplo, tienen un 100 % de cancelaciones hasta finales de abril.
Es tal la situación que los grupos de gestión en Europa han firmado un documento conjunto de apoyo al sector de agencias de viajes. ¿Hay alguna alternativa? Sí, se puede posponer: en el sector ya se habla del bono de viaje como una posible solución. Una propuesta que pasa por flexibilizar la normativa sobre viajes combinados.
Revista Dossier Empresario
