El sommelier del restaurante El Celler de Can Roca, recorrió Cafayate, al sur de la provincia argentina de Salta, durante la cuarta jornada de su viaje de conocimiento al país sudamericano, como paso previo a la gira gastronómica que BBVA y el mejor restaurante del mundo 2013 organizarán en Buenos Aires el próximo mes de agosto.
Cafayate se ha erigido como una de las áreas vitivinícolas más pujantes de Argentina, por lo que el mediano de los hermanos Roca no quiso dejar pasar la ocasión para visitar a diversos enólogos y bodegueros, que le pusieron al día sobre las características de los vinos de la zona, cada vez más al alza en los mercados nacional y extranjero.
Josep Roca palpa una de las vides del viñedo de la bodega Finca Quara, en el Valle de Cafayate, al sur de la provincia argentina de Salta, durante la cuarta jornada de visita del sommelier de El Celler de Can Roca al país sudamericano como parte de su viaje de conocimiento previo a la Gira BBVA – El Celler de Can Roca del próximo mes de agosto.
Josep Roca palpa una de las vides del viñedo de la bodega Finca Quara, en el Valle de Cafayate, al sur de la provincia argentina de Salta, durante la cuarta jornada de visita del sommelier de El Celler de Can Roca al país sudamericano como parte de su viaje de conocimiento previo a la Gira BBVA – El Celler de Can Roca del próximo mes de agosto.
La ajetreada jornada –en la que se cataron decenas de vinos viajando de bodega en bodega- permitió a Josep Roca analizar las modificaciones que han definido la industria del vino en Argentina en los últimos años. Según el sumiller, “aquí se ha producido un cambio fascinante, un cambio de pensamiento, de reinterpretación, de madurez conceptual. Argentina vive un momento brillante del que mis hermanos y yo queremos formar parte; va a haber un antes y un después para nosotros después de este viaje”.
Alojarse en la Finca Quara, una de las bodegas más antiguas de Salta, es un privilegio para cualquiera, especialmente si se tiene tiempo para disfrutar de su paisaje tranquilo, su cielo limpio y sus viñedos enmarcados por montañas. El enólogo José Luis Mounier, propietario además de Bodegas Mounier, guió a Josep Roca en su paseo entre vides y barricas, origen de una producción de tres millones de botellas al año, aleccionándolo sobre cómo Cafayate se caracteriza por la altitud de su territorio y la amplitud térmica de su clima, lo que permite obtener frutas, verduras y especias con gran concentración de sabores y aromas.
Josep Roca charla con el enólogo José Luis Mounier durante su recorrido por la bodega del mismo nombre, en el Valle de Cafayate, al sur de la provincia argentina de Salta, durante la cuarta jornada de visita del sommelier de El Celler de Can Roca al país sudamericano como parte de su viaje de conocimiento previo a la Gira BBVA – El Celler de Can Roca del próximo mes de agosto.
Josep Roca charla con el enólogo José Luis Mounier durante su recorrido por la bodega del mismo nombre, en el Valle de Cafayate, al sur de la provincia argentina de Salta, durante la cuarta jornada de visita del sommelier de El Celler de Can Roca al país sudamericano como parte de su viaje de conocimiento previo a la Gira BBVA – El Celler de Can Roca del próximo mes de agosto.
“En Argentina la cultura vitivinícola cambió en 1990, para pasar de la cantidad a la calidad”, explica el enólogo. “Se mejoró la tecnología y el profesionalismo, y ahora nuestro reto es hacer una viticultura más de precisión, de cirugía fina, buscando la elegancia. Eso es lo que estamos tratando de hacer”.
Vinos catados en Bodegas Finca Quara:
Torrontés 2013 Viña La Esperanza
Malbec 2012 Viña Cabra Corral
Cabernet sauvignon 2011 Viña San José
Tannat 2011 Viña El Recreo
Alpahaca 2010
Vinos catados en Bodegas José Luis Mounier:
Torrontés 2013
Torrontés 2014
Finca Las Nubes cabernet-malbec 2013
José Luis Munier reserva 2011
Laguna Brava tannat 2012.
Disfrutando de los valles que aglutinan la industria del vino en la zona, el siguiente paso de Josep Roca fueron las bodegas Domingo Molina, una instalación de unas 30 hectáreas y 300.000 botellas de producción anual dedicada al vino tinto casi completamente. Su dueño, Rafael Domingo, considera que “en Salta hacemos unos vinos más especiados y pimentosos que los mendocinos. Yo creo que en los próximos años el tannat va a ser uno de los varietales insignia de nuestra región”.
Vinos catados en Bodegas Domingo Molina;
Domingo Molina 2015 torrontés (terruño Cafayate)
Domingo Molina 2014 torrentés (terruño Tolombón)
Domingo Molina malbec 2015 y 2014
Domingo Molina tannat 2015
Domingo Molina cabernet 2011
Domingo Molina tannat 2013
Rupestre 2011
Domingo Molina torrontés 2014
Hermanos de Domingo Molina torrontés 2013
Finca Domingo torrontés 2014
Por supuesto, tanto buen vino tenía que estar acompañado de un acercamiento a la gastronomía local, con cierto aire a la cocina de Jujuy aunque con su propia personalidad. Josep Roca fue acogido con alegría en la bodega San Pedro de Yacochuya en el Valle Calchaquíes, donde los hermanos Pablo y Marcos Etchart, símbolos ambos de la hospitalidad salteña, pusieron sobre la mesa empanadas de carne y papa, humitas en chala de choclo, y un charquicillo con arroz –así se conoce a la carne guisada por estos lares- preludio de un quesillo con dulce de higo a modo de postre. Al almuerzo se unió desde la lejanía del Valle Calchaquí el bodeguero Raúl Dávalos, de la bodega Tacuil –a unas tres horas por carretera de montaña-, que también surtió con sus propios caldos los diferentes platos que se consumieron.
Vinos catados en Bodegas San Pedro de Yacochuya:
San Pedro de Yacochuya torrontés 2014
Coquena tannat 2014,
San Pedro de Yacochuya malbec 2012
33 de Dávalos 2013 de Bodegas Tacuil
Viña de Dávalos 2013 de Bodegas Tacuil
RD savignon blanc 2014 de Bodegas Tacuil
Yacochuya 2006
Yacochuya-Tacuil 2013, híbrido de las dos bodegas.
Con la pesadez del clima templado, y con la pena de abandonar un lugar y un ambiente festivos –las bodegas San Pedro de Yacochuya se jactan de tener las mejores vistas panorámicas de toda la provincia-, Josep Roca continuó camino hacia la pequeña bodega de Salvador Figueroa, toda una institución regional que a sus más de 80 años sigue ligado a la producción de vinos sellados por la calidad y los métodos tradicionales. Escuchar a don Salvador hablar de sus vinos como si fueran sus hijos –“uno los quiere igual aunque a veces no le guste cómo salen”- es una práctica tanto didáctica como hipnótica.
Josep Roca escucha las explicaciones del veterano viticultor Salvador Figueroa durante su visita a las bodegas Figueroa, en el Valle de Cafayate, al sur de la provincia argentina de Salta, durante la cuarta jornada de visita del sommelier de El Celler de Can Roca al país sudamericano como parte de su viaje de conocimiento previo a la Gira BBVA – El Celler de Can Roca del próximo mes de agosto.
Josep Roca escucha las explicaciones del veterano viticultor Salvador Figueroa durante su visita a las bodegas Figueroa, en el Valle de Cafayate, al sur de la provincia argentina de Salta, durante la cuarta jornada de visita del sommelier de El Celler de Can Roca al país sudamericano como parte de su viaje de conocimiento previo a la Gira BBVA – El Celler de Can Roca del próximo mes de agosto.
Aquejado de una sordera que se mitiga gracias a los esfuerzos de su hija menor, don Salvador Figuera impartió una improvisada conferencia: “Yo hago el vino salteño que se hacía antes, porque estoy en contra de la tecnología de punta. Yo trabajo como lo he hecho siempre, buscando los mejores racimos más por mi análisis gustativo que mediante análisis químicos, con cariño y con memoria para intentar hacer los vinos todos los años iguales”.
Entre sabidurías de ida y vuelta, Josep Roca y don Salvador compartieron un Gualiama malbec 2014, un Gualiama malbec envejecido en roble 2014 y un Los 5 Figueroa torrontés 2014, ejemplos todos de una producción que no alcanza las 12.000 botellas al año. “Para nosotros un vino es como un niño recién nacido, al que le tomamos la temperatura cada hora todas las noches, algo que las grandes bodegas dejaron de hacer hace muchos años, pero que para mí sigue siendo importante”, comentó Figueroa como epílogo a su visitante.
“Conversar con don Salvador ha sido un baño de autenticidad, de tradición familiar, de transmisión de valores. Quizás para mucha gente esta no es la única forma de alcanzar la excelencia, pero en El Celler de Can Roca, donde tres hermanos trabajamos juntos, este concepto es muy fácil de entender”, comentó Josep Roca al despedirse de Salvador Figueroa.
La jornada, repleta de emociones, aprendizajes y vinos, desembocó como destino final dentro de la ciudad de Cafayate, ubicación privilegiada de la bodega El Porvenir, dirigida por la juventud de Lucía Romero y el enólogo Mariano Quiroga, pioneros en la región estudiando el suelo como principal componente para definir sus vinos. Durante la cena en la casa familiar, que consistió en empanadas y tamales de carne, sopa de gallina y queso con cuaresmillas, Lucía Romero defendió la necesidad de dar a conocer al mundo el tannat de Cafayate “porque es muy distinto al uruguayo, que se produce a nivel del mar y en zonas mucho más lluviosas”.
Vinos catados en Bodegas El Porvenir:
Amauta 2014 Corte I Inspiración
Laborum Malbec 2014 Finca de Río Seco
Laborum cabernet 2014
Laborum tannat 2014
Laborum torrontés 2014
El Porvenir 2006
Josep Roca resumió su paso por Cafayate como “una experiencia total, con un paisaje sorprendente y muy potente, con ganas de mostrarse al mundo. Salta está en esa etapa de adolescencia creativa, donde se aprende y se desaprende, donde se importa conocimiento de fuera pero ya se desarrolla un estilo propio que se perfila como perdurable”.
El Celler de Can Roca, actualmente número 2 mundial según el ranking de la revista británica Restaurant, realizará de la mano de BBVA en agosto y septiembre de 2015 la segunda edición de su gira gastronómica anual , que transcurrirá por Estados Unidos y Turquía tras su paso por Argentina.
Durante cinco semanas, Joan, Josep y Jordi Roca, acompañados por unos 40 cocineros y camareros de su equipo procedentes de Girona, servirán a más de 2.500 clientes e invitados de BBVA en Buenos Aires, Miami, Birmingham, Houston y Estambul, elaborando un menú especial y distinto en cada país homenajeando la cultura y la gastronomía locales.
A lo largo del primer semestre del año, los tres hermanos Roca viajarán miles de kilómetros para conocer en primera persona a los protagonistas de la cocina turca, la estadounidense y la argentina, y adquirir conocimientos nuevos que les permitan crear recetas únicas que reflejen su visión innovadora de la comida de los tres países.