Musimundo, la cadena de venta de CDs y DVDs más importante del país, acaba de lanzar un plan con el claro objetivo de amortiguar los efectos de la piratería. Conocedores del impacto que produce la venta ilegal, sumada a la cada vez más fuerte penetración de la música digital en la industria, los directivos de la firma que maneja el fondo de inversión Pegasus pusieron en marcha una estrategia para ganar terreno en esta pelea.
De este modo, los locales de Musimundo, aquellos en los que la infraestructura lo permita, se transformarán en nuevos reductos porteños para la realización de recitales.
“Se trata de un concepto al que llamamos M Experience, y con el que buscamos un acercamiento de la gente hacia la disquería”, explicó Carlos Jamardo Arrigo, gerente de Marketing de Musimundo.
El primer paso dentro de esta apuesta lo dio Ken Stringfellow, ex guitarrista de R.E.M., que se presentó hace unas semanas en el local de Florida 770.
Y el listado de artistas es prometedor. Hasta hoy, el golpe más fuerte lo dará la mítica banda Living Colour, que pisaría Buenos Aires en noviembre de este año. Además, figuran en carpeta otros grupos muy taquilleros en la actualidad, como la uruguaya “No te va a gustar”.
La propuesta de Musimundo, sin dudas, pasa por una cuestión netamente estratégica, descartando la posibilidad de incursionar en el negocio de la producción de espectáculos.
En primer lugar, las bandas o solistas no llegarán al país de la mano de la cadena, sino a través de las productoras de espectáculos, que los traerán para presentaciones en lugares “clásicos”, como los estadios.
Por otra parte, la idea no es sacar rédito con la venta de entradas, sino que, dependiendo del artista invitado, el ingreso a los shows será gratuito, aunque en caso de que se prevea una gran convocatoria se dispondrá de mecanismos para que los interesados retiren sus tickets sin ningún costo. “Nuestro nicho es el retail y allí nos quedaremos. En estos casos simplemente nos sumaremos a las propuestas que realicen las productoras”, dijo Jamardo Arrigo.
Si bien el de Florida 770 fue el encargado de dar el puntapié inicial, también está previsto que los locales de Corrientes y Callao, Paseo Alcorta, Alto Avellaneda o La Plata formen parte de la grilla de recitales.
Dentro de las contras que afronta la venta de “música física” aparecen dos: el retroceso de los CD’s, DVD’s y cassettes; y la música on line.
En el primer caso, según datos de la Cámara Argentina de Productores de Fonogramas y Videogramas (Capif), la venta de CD‘s, DVD‘s, cassettes y singles, pasó de 18,1 millones de unidades en 2007 a 15,9 millones el año pasado. Y la tendencia a la baja se mantendría en 2009, casi en su totalidad a raíz de la piratería.
En el segundo “mal”, el mercado de canciones a través de los celulares se viene incrementando a un ritmo sostenido. Aumentó un 45% en 2008 y cerró en u$s 42 millones, contra los u$s 29 millones de 2007. Este año las previsiones indican que llegaría hasta los u$s 50 millones.