El ingeniero agrónomo Guillermo Martini asumió en septiembre de 2012 como director general del Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores (Renatea) de la Nación.
Martini estuvo por algunos días en Salta para asistir a la firma de convenios con distintas instituciones. Además, tuvo tiempo para dialogar con El Tribuno sobre la situación actual del sector rural.
“De tener 15 denuncias por parte de los trabajadores en el 2012 pasamos a tener 16 por día a nivel nacional”. De esa forma Martini destacó los avances en la legislación y su aplicación.
¿La ley 26.727 de trabajo agrario viene a remediar tanta desprotección durante tantos años?
La ley claramente es muy progresista con respecto a lo que había. Nombra por primera vez cuestiones que habían sido derogadas de la Ley de Trabajo, por directivas de Videla y Martínez de Hoz. Esa ley reinstauraba el trabajo de sol a sol, suspendía las convenciones colectivas y el derecho a huelga. Esta ley viene a remediar eso.
¿Qué cambios generó la norma?
Generó un gran cambio en el conocimiento de derechos de los trabajadores rurales. Nosotros pasamos de tener 15 denuncias por parte de los trabajadores en el 2012, a tener 16 denuncias por día a nivel nacional. Pero lo que cambió fundamentalmente es la relación con los sectores patronales y los sectores de los trabajadores.
El tabaco es muy importante en Salta, ¿Cuántos empleados tiene registrado ese sector?
El sector tabacalero en Salta, en el primer trimestre del año pasado, tenía 11.700 trabajadores registrados. Este año, en el primer trimestre tuvimos 13.700. Se incrementó un 17% la registración. Esto es la puerta de entrada para que la persona pueda acceder a una serie de programas.
¿Cómo cuáles?
Ponemos a disposición del trabajador una serie de herramientas de formación profesional como el programa de capacitación Yo sí puedo, o el programa de inclusión socio productiva. Además tenemos vinculación directa con los planes Procrear y Progresar para aquellos trabajadores que reúnen las condiciones.
Ustedes mantienen una fuerte lucha contra el analfabetismo.
En Salta hay 30.000 analfabetos funcionales, de los cuales el 55% son trabajadores rurales y el grueso de ese porcentaje son mujeres. Con el programa Yo sí puedo intentamos combatir este flagelo de Salta.
En las inspecciones que realizan, ¿registran trabajo infantil?
A nivel nacional, durante los últimos seis meses, en más de 400 operativos, encontramos 82 menores de 14 años. Ahora hay una ley que prohibe taxativamente el trabajo infantil y lo convirtió en delito. O sea, alguien que contrata un chico menor de 14 años tiene una pena de prisión de 3 a 8 años. Para la ley es un delincuente.
¿Es una constante?
Lamentablemente es una constante. Pero también es parte de una realidad porque en muchos casos se dan cuando la madre va a trabajar y se lleva a los chicos porque sino los tiene que dejar en la casa solos.
¿Sirven las inspecciones?
A nosotros no nos interesa inspeccionar o registrar a las piñas un lugar, porque entre otras cosas es altamente ineficiente. Nosotros somos un organismo del Estado. Tenemos la posibilidad de cruzar datos, realizar un análisis y ver si hay datos que corresponden. La inspección es la última instancia. Además, es costoso, duro, violento y hasta peligroso. Aunque las vamos a seguir haciendo; es una de las atribuciones de Renatea.
¿Qué hacen cuándo registran trata laboral?
Hay muchos casos en donde la situación del trabajador configura directamente trata laboral. En ese caso nosotros nos presentamos a la justicia y presentamos las pruebas. Ya que no somos querellantes.
¿Cómo va a seguir trabajando Renatea de cara al futuro?
Vamos a seguir profundizando los cuatro ejes estratégicos. La registración, la consolidación de la red institucional de trabajo de Renatea, el fortalecimiento de la organización de los trabajadores y por último reforzar el tema de la fiscalización.
Fuente: Martín Rodríguez, El Tribuno