El Gobierno le tiene fe al mercado automotor para este año y espera que repunte con fuerza, impulsado por la recuperación económica y una baja en los precios gracias a la reducción de impuestos. La apuesta es clara: que más argentinos puedan acceder a un 0km sin que el precio sea una barrera imposible de superar.
Uno de los puntos clave de este plan es la llegada de unos 50.000 autos híbridos importados a lo largo del año. ¿Qué tienen de especial estos vehículos? Que combinan un motor eléctrico con uno a combustión, lo que les permite gastar menos nafta y contaminar menos. Es decir, una opción más ecológica y, en teoría, más económica en el uso diario.
El cupo de estos 50.000 autos híbridos se dividirá en partes iguales entre la Asociación de Fabricantes de Automotores de Argentina (ADEFA) y los importadores nucleados en CIDOA. Ambos sectores tendrán que comprometerse a venderlos al menor precio posible, para que el beneficio de la quita de impuestos realmente llegue a los consumidores.
El objetivo de fondo es claro: aumentar la cantidad de autos con tecnología electrificada en las calles argentinas y, de paso, presionar a la baja los precios de los 0km más vendidos.
El crecimiento del mercado de híbridos y eléctricos ya venía en alza. En 2024, se patentaron en el país 14.175 unidades con este tipo de motorización, un número que representa un crecimiento del 48% en comparación con 2023, cuando se habían registrado 9.558.
Dentro de este segmento, el modelo más elegido por los argentinos sigue siendo el Toyota Corolla Cross (HEV), que el año pasado tuvo nada menos que 7.614 unidades patentadas. La marca japonesa domina ampliamente el sector de los híbridos en Argentina, con varios modelos en su oferta que combinan motor eléctrico y a combustión.
Con esta iniciativa, el Gobierno busca darle un empujón a este tipo de vehículos y facilitar el acceso a tecnologías más limpias y eficientes. Si la estrategia funciona, no solo bajarán los precios, sino que también se podría acelerar la transición hacia un parque automotor más moderno y menos contaminante. Habrá que ver si el mercado responde y si las automotrices efectivamente trasladan la rebaja de impuestos al precio final de los autos.
Fuente: DÓLAR HOY