El tiempo - Tutiempo.net

Los que apuestan, los que no

0


Compartí esta nota

Automotrices y productoras de aluminio figuran entre las que más dinero destinan; petroquímicas y gasíferas están en el otro extremo. Una gran empresa cerealera hizo esta semana una inversión millonaria para la construcción de una planta de biocombustibles y otro impactante desembolso anunció hace unos meses una importante automotriz para fabricar un nuevo vehículo, al tiempo que un contratista rural se lamenta de que ya no compra maquinaria como hace dos años y la producción de gas y electricidad sigue en caída.

El vaso medio lleno y medio vacío de una Argentina que muestra nichos de inversión, acompañamiento de la demanda o nula inyección de dinero.

A la hora de mencionar cinco sectores en los que sí se invierte, el economista Dante Sica, de la consultora Abeceb.com, nombra a las automotrices (Ford, Volskwagen o Peugeot), a productoras de insumos intermedios (Aluar o Techint), algunas petroleras (Pan American Energy), laboratorios (sobre todo los nacionales) y fabricantes de línea blanca (Alladio, por ejemplo). “Por el lado de los que no invierten, pondría al campo, que hizo su gran inversión en los noventa, las petroquímicas, las refinerías de combustible, las empresas de energía eléctrica y gasífera y las firmas de alimentos”, señala Sica, que aclara que, si bien en todas hay algo de inversión, ésta solo acompaña la demanda o es insuficiente para las pretensiones de crecimiento.

El Ministerio de Industria de la Nación destaca entre las que más invierten a Aluar, Ford, Telefónica, YPF y Walmart, entre otras. Aluar puso US$ 315 millones en la segunda fase de su proyecto para ampliar en 105.0000 toneladas anuales su planta de aluminio primario. La petrolera, según la fuente oficial, desarrolla un plan de inversiones por US$ 500 millones en exploración. Walmart, en tanto, destinará US$ 150 millones en la apertura de 15 sucursales. En Ford informaron que los $ 1000 millones anunciados hace unos meses para el período 2010-2012 son para un nuevo vehículo que se producirá en Pacheco. “Corresponde a una nueva plataforma global de Ford, que hoy no se hace en ninguna otra planta y que comenzará en 2012”, destacan en la firma. Telefónica confirmó inversiones en telefonía fija, Internet y móviles para este año por $ 2100 millones. “Están focalizados en el aumento de la capacidad de Internet móvil y la penetración de la banda ancha”, comenta una fuente del grupo.

Todas estas inversiones no alcanzan para duplicar la demanda, que es lo que debería ocurrir en un país que aspira a cierto crecimiento y que hoy tiene una inversión del 21% del PBI, cuando lo aceptable sería estar por encima de 25. Juan Luis Bour, economista de FIEL, afirma que no hay un plan general de inversiones. “Lo que se invierte ahora es para destrabar cuellos de botellas”, advierte. En el sector petroquímico, analiza que es imposible que haya inyección de dinero, porque no hay gas. “Podés tener algo en las áreas petroleras que cambiaron la refinación o que ahora hacen biodiésel, porque para eso sí tienen materia prima y les alcanza la tecnología que ya instalaron.” En este tipo de inversiones ingresan los $ 450 millones que anunció esta semana Cargill para la construcción de una planta de biocombustibles, en la ciudad santafecina de Gobernador Gálvez, que comenzará a producir en septiembre de 2011, según confirmó su presidente, Hugo Krajnc. “Si ya hacés aceite de soja, no hay riesgo en hacer aceite para biodiésel.

Pero inversiones más riesgosas no vamos a ver”, explica Bour. El caso de las automotrices es otro ejemplo, ya que, si bien pasan por un buen momento, no conforman un proceso integrador con las autopartistas, que son unos de los sectores nacionales que más sufren y que ven cómo gran parte de la producción se hace afuera. En el primer semestre, las importaciones de ese rubro alcanzaron a los US$ 4477 millones de dólares, el 74,2% más que en el mismo período de 2009, según la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES). El agro ya no reluce (más allá de que se cosechen 100 millones de toneladas) y, según Sica, el recambio tecnológico se dio en los 90. Aun así, hubo renovación de maquinarias en 2007 y 2008. Pero ya no. Patricio Chaintiou, productor y contratista rural en Carlos Tejedor, provincia de Buenos Aires, ratifica el dato. “Más que cambiar lo que hace, es reparar para seguir trabajando”, dice el joven que trabaja unas 1800 hectáreas en el noroeste bonaerense. En ganadería, la desaparición de 15 millones de cabezas es desinversión.

Entre las que menos invierten también están empresas como Metrogas, Edenor, Edesur, Edelap, Transportadora de Gas del Sur (TGS) y Transportadora de Gas del Norte (TGN)y AySA. Tarifas congeladas, intervención del Estado y estatizaciones hicieron lo suyo para que eso ocurriera. “Lo mismo pasa con la infraestructura vial: tenés que esperar que el Gobierno decida la construcción tal o cual”, dice Bour. En minería, el aumento de impuestos por encima de lo que garantiza la ley de estabilidad tributaria y cuestiones ambientales tienen paralizada la mayor parte de los proyectos.

                                                                                                                                     Fuente: lanacion.com


Comments are closed.