Una norma reciente provocó el enojo de los vendedores de soja que se abstuvieron de liquidar la moneda estadounidense.
El Gobierno quiere bajar el precio del dólar, pero parece tomar medidas que lo hacen subir. Con una norma reciente provocó el enojo de los exportadores de soja que se abstuvieron de liquidar divisas y provocó la segunda ronda de alza de la divisa.
El volumen de negocios del mercado mayorista muestra el enojo de los exportadores de granos: Se liquidaron USD 47 millones que el día anterior y el dólar subió 65 centavos (+1,45%).
El problema es que el Gobierno para cerrar el vacío fiscal que le provocó la caída del consumo, aumentó la Tasa de Estadística para importaciones. Estaba en 0,5% y la elevó hasta 2,5% y al mismo tiempo suspendió el beneficio a los que estaban exentos de pagarla porque eran importaciones temporales.
Entre los exentos estaban los exportadores de soja. Ellos venden al exterior la soja con valor agregado. La procesan en la Argentina y la venden al exterior como harina o aceite. Como la producción local no alcanza para la demanda que tienen estos productos con valor agregado, importan soja temporariamente de Brasil y Paraguay. Antes de la medida no pagaban ese gravamen. Ahora tendrían un costo adicional de 42 millones de dólares anuales que se suman a las retenciones de 27% y a los $4 por dólar que tributan cada vez que exportan. Desde el Gobierno aseguran que no será así y ya hay rumores de que revisaría la norma.
Igual, los exportadores no vendieron sus dólares en la plaza mayorista. ¿El miércoles repitan el comportamiento? Como sea, les preocupa la medida porque tienen compromisos de compra de soja con Paraguay y Brasil para todo el año. Pero no solo el sojero es el sector afectado. También alcana a la industria. La medida le deja al Tesoro USD 700 millones, pero ese gravamen se trasladará a precios y provocará más inflación además de tener que lidiar con un dólar en alza.
A todo esto, el dólar en bancos y casas de cambio aumentó 43 centavos a $46,35 (+0,93%). Otra prueba de que el dólar se fortalece, es que el “blue” subió a 46 pesos. Fue demandado por clientes para cubrirse de los altibajos diarios.
Quien crea que cuando intervenga el Banco Central va a calmar la efervescencia del mercado cambiario, se equivoca. El FMI habría advertido, cuando lo autorizó a vender dólares, aunque no se perforara el techo de la banda cambiaria, que sean prudentes en el uso de las divisas. Solo dispondría de USD 9 mil millones adicionales y no podrían intervenir en la plaza sin autorización del FMI. Eso le quitaría al Central autonomía para intervenir porque el tiempo lo maneja el FMI. El riesgo es que las autorizaciones se pueden demorar.
Las reservas bajaron USD 1.926 millones a 68.926 millones por el pago de alrededor de USD 1.800 millones por amortización y renta del Boden 2024. Los dólares están depositados y lo cobrarán el miércoles. La incógnita es si volverán al sistema o se quedará en el “colchón” como sucedió con el vencimiento del Bonar 2019. También influyó la venta de los 6 millones diarios y la caída del euro y del oro.
Donde el Central tuvo una buena performance fue en las Letes (Letras del Tesoro a 70 días) donde colocó todo lo que se propuso pagando una tasa de 4% para bonos de tan corto plazo. El otro acontecimiento fue que se licitaron Letras de Capitalización a una tasa de 5% mensual. Por estos títulos recaudó $31.127 millones.
La Bolsa, tuvo un leve tropiezo. El S&P Merval, el índice de las acciones líderes, perdió 0,75%. Los negocios siguieron en niveles reducidos. Se operaron $560 millones.
Los ADR’s argentinos -certificados de tenencia de acciones que cotizan en Wall Street- tuvieron bajas generalizadas. Banco Supervielle con una pérdida de 8,17% fue la de peor performance.
Para el miércoles se espera otra rueda compleja. El destino del dólar, ahora más que nunca está en mano de los exportadores. Si no aparecen en el mercado, seguirá la suba de la divisa.
Fuente: El Tribuno Salta