El superávit comercial cayó en el primer semestre un 25,5% por las mayores compras de combustibles, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). El déficit energético creció en ese lapso un 78% interanual, hasta los u$s 3.247 millones.
Así, el saldo positivo en la balanza comercial totalizó en los primeros seis meses u$s 4.954 millones. La cifra representa el 37,1% de la meta que se puso el Gobierno en el Presupuesto 2013, de u$s 13.325 millones. En otras palabras, queda un semestre para conseguir u$s 8.371 millones, lo que podría traducirse en nuevas restricciones para la importación de productos.
Como en los meses previos, las compras de combustibles explicaron buena parte del incremento de las importaciones en junio. La adquisición de energía creció 7% el mes pasado y 23% en el semestre, hasta los u$s 6.120 millones. Esa salida de divisas creciente se traduce en un resultado comercial inferior y en menores reservas en el Banco Central, ya que el comercio representa el único ingreso de divisas. Así lo publicó El Cronista.
El incremento del déficit energético tiene un rol crucial para explicar esta contracción en el superávit comercial, indicó la consultora Abeceb.com en un reporte. El resultado comercial hubiera sido similar al del año pasado de no haberse profundizado el rojo energético. En seis meses, las exportaciones subieron 5% y las importaciones, 11%.
El grueso de las importaciones se incrementaron en el primer semestre. Además de la compra de combustibles, se destacó la adquisición de vehículos automotores de pasajeros, que creció 20% hasta los u$s 3.212 millones; la de bienes de capital, que avanzó 11% a u$s 5.780 millones; la de piezas para bienes de capital (14% a u$s 7.522 millones); y la de bienes de consumo (13% a u$s 3.666 millones). Los bienes intermedios (insumos industriales, entre otros) crecieron apenas 1%, hasta u$s 9.573 millones.
En junio, las exportaciones se incrementaron 8% por la mejor cosecha. La venta de productos primarios creció 20%, hasta los u$s 2.145 millones. La expansión es similar en el semestre. El incremento se explica tanto por suba de precios (14%) como de cantidades (7%), ya que las mejores ventas de maíz y soja compensaron los retrocesos en los ya débiles envíos de trigo.
Los u$s 7.551 millones exportados contrastaron con importaciones por u$s 6.396 millones, o un 5% superiores a las de igual mes de 2012. Fue el segundo mes en el que el superávit creció en términos interanuales (totalizó u$s 1.155 millones y aumentó 27%), lo que no alcanzó para revertir el deterioro de la primera mitad del año. El único rubro de exportaciones que no registró un incremento en junio fue, precisamente, el que agrupa a los Combustibles y lubricantes, que se contrajo 12% y 19% en el semestre.
