Empresarios hablan de una típica posición dominante que fija altas comisiones e intereses.
El encuentro será a las 11 y tiene por objetivo denunciar los altos costos del sistema de tarjetas de crédito y débito en Argentina.
“Las tarjetas de crédito cobran a los comercios argentinos una comisión de 3%, que está por encima del 1,5% que se cobra en Perú y el 1,3% que rige en Brasil”, informó la CAC.
Para la entidad que representa al sector del comercio y las empresas de servicios existen tres cuestiones que distorsionan las ventas a través de estas tarjetas. “Una es la alta comisión que paga el comerciante a la tarjeta por cada operación, porcentaje que está por encima de los niveles internacionales”, indicó la CAC.
El comunicado agrega que la segunda es es la adquirencia y que la tercera, es el esquema de procesamiento y financiación, por el cual las tarjetas reintegran los montos en un período excesivo a la fecha de la venta.
En esa línea, el vicepresidente primero de la Federación Económica de Tucumán (FET), Héctor Viñuales, afirmó a LA GACETA que hay una serie de costos operativos que impactan en el precio final vinculados con el financiamiento con las tarjetas que, a su vez, ejercen un monopolio que, en muchos casos, apuntan más a beneficios de las grandes cadenas en desmedro de los comercios más pequeños.
“Vemos que el objetivo de cualquier gestión ha sido la bancarización, con el fin de que se formalice la economía; sin embargo, para que eso pueda cumplirse, adicionalmente debería pensar en bajar los costos, como el caso de los aranceles que cobran las tarjetas de crédito”, indicó el directivo.
Viñuales recordó que este planteo fue expuesto recientemente a Cabrera. “Indudablemente que esto no sólo beneficiaría al comerciante, sino también al consumidor final, ya que implicaría una reducción en el costo de financiamiento”, apuntó.
