Un informe de la Auditoría General de la Nación (AGN) señala que las provincias -a excepción de Capital y Buenos Aires- dependen en gran medida de los fondos que reparte la Nación para cubrir sus gastos.
Según el informe de la Auditoría, publicado por momarandu.com, en promedio, sólo el 27% de los ingresos que generan las provincias provienen de impuestos propios.
Este dato aparece en una de las primeras investigaciones aprobadas en 2015 por el organismo de control, que analizó las deudas que mantienen las provincias con el Estado nacional –contando desde 2008 hasta 2011-; además de medir la sustentabilidad financiera de esos compromisos y los posibles impactos que podrían generar en las arcas de la Nación.
Corrientes, Jujuy, Catamarca, Santiago del Estero, La Rioja y Formosa, en función de sus números, tienen las autonomías financieras más bajas.
Le siguen en cuanto a autonomía más baja las provincias de Chaco, San Juan, Salta, San Luis, Misiones, Entre Ríos, La Pampa, Río Negro, Tierra del Fuego y Tucumán.
La Ciudad de Buenos Aires la que encabeza ese ranking ya que, según el organismo de control, es “la única que tiene autonomía financiera total”.
Le siguen en la lista, con autonomía media, las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, Chubut, Mendoza, Neuquén y Santa Cruz.
Explica la Auditoría que “las jurisdicciones provinciales con capacidad de cancelar sus pasivos, serán aquellas que cuenten con ingresos corrientes propios y/o transferidos suficientes para cubrir los servicios de deuda de cada año fiscal sin aumentar su saldo deudor total”.
En ese sentido se destaca que “en la conformación de los recursos provinciales son determinantes los Ingresos Tributarios”. Tanto es así que, en promedio, la participación de los impuestos en la masa de fondos disponibles por las jurisdicciones alcanza el 75%.
No obstante, la AGN observó que gran parte de ese dinero no es generado por las mismas provincias sino que, en mayor medida, provienen de lo que reparte la Administración Central mediante Coparticipación Federal, Aportes del Tesoro Nacional y Transferencias, como el Fondo Federal Solidario, o fondo sojero.
Esto impacta en casi todos los territorios, a excepción de Capital Federal y la provincia de Buenos Aires, que “se destacan por contar con los ratios de recursos tributarios propios más elevados, lo que indica su grado de autonomía en la administración fiscal”, dice la Auditoría.
El informe, asimismo, detalla el grado de autonomía financiera de las jurisdicciones, es decir, la “capacidad de generar recursos propios en relación con el total de ingresos, con el fin de afrontar con solvencia cualquier estrategia de endeudamiento elegida”
Fuente: Región Norte Grande